lunes, 30 de marzo de 2015

GROMOS VERDES?

“O 2015 será o ano do despegue definitivo da economía española” (Mariano Rajoy, Presidente do goberno de España), “España entrou no 2015 a velocidade de cruceiro” (Luis de Guindos, Ministro de economía e competitividade do goberno de España). O Banco de España eleva a previsión de crecemento da economía española ata o 2,8% para 2015 e o 2,7% para o 2016. “Medramos (Galiza) o 0,4% no 2014 e a previsión agora para este ano (2015) e de 2%, moi superior á inicial” (A. Nuñez Feijoó, Presidente da Xunta de Galiza).

Cada vez son mais frecuentes as aparicións nos medios de comunicación e opinión de declaracións de diferentes actores da vida política e social galega i española asegurando que a crise queda atrás i que estamos entrando nunha fase de recuperación solida da economía: que aparecen gromos verdes solidos.
Que hai de certo en todo isto?. Que estamos atravesando un claro logo da grande tormenta recesiva pero que de ningures se trata dun horizonte despexado pois os nubarróns que provocaron a tormenta anterior seguen ahí. Explicome.
Hai nestas datas unha moi notable baixa do prezo de petróleo –o barril de petróleo chegou a estaren por baixo dos 50 dólares-. Na economía mundial actual calquera baixa no prezo dos combustibles fortalece a demanda agregada. Por qué?: por que supón que os axentes económicos poderán empregar ese diñeiro, que agora aforran, na economía propia –consumo, investimento, gasto público…- con efectos inmediatos sobre a demanda agregada e, xa que logo, no crecemento económico nuns estados europeos –entre elas España- que teñen unha demanda moi débil.
Ao mesmo tempo o euro baixa a súa cotización con relación ao dólar e as outras divisas relevantes –nestas datas esta por baixo dos 1.10 dólares e segue baixando-. Unha caída do euro supón un impulso as exportacións e, xa que logo, unha mellora do saldo neto exterior –aínda que ten o agravante de frear as importacións: son mais caras-. Unha mellora no saldo exterior que, tamén, repercute positivamente na demanda agregada favorecendo asemade o crecemento económico.
Como terceiro elemento positivo, pero menos, está a decisión do BCE de ofertar unha liquidez abondosa –segundo o seu presidente M. Draghi, o BCE investirá mais de 1 billón de euros en compras masivas de débeda pública- que temporalmente tirará da oferta e da demanda e contribuirá a mellorala situación económica. Nembargantes esta decisión ten tamén elementos moi negativos: con unha liquidez abondosa e uns tipos de xuro moi baixos o BCE está animando a grande banca europea a seguir especulando xa que esta sabe que en caso de teren problemas aquel acudirá de novo no seu auxilio, polo que esa liquidez dificilmente chegará as familias (para
animar o consumo) e as pemes (que son as grandes creadoras de emprego). Asemade unha liquidez abondosa e uns moi baixos tipos de xuro favorecerán a creación de novas burbullas que, con toda seguridade, axiña faranse visibles. E xa sabemos que pasa cando se crean burbullas: que logo explotan.
Un último elemento, tamén enganoso, que pode axudar a crear unha falsa imaxe de que a crise queda atrás é a creación de emprego. Unha falsa imaxe xa que os empregos que se están creando son en base a unha forte baixada dos salarios –a metade dos empregos creados no 2014 tiñan un salario inferior aos 900 euros mensuais- e un incremento notable da precariedade laboral –aceptanse empregos a tempo parcial non por que non se quieran empregos a tempo completo senón por que non existen-. Se a curto prazo esta dinámica laboral pode que provoque efectos positivos sobre a demanda, a medio e longo prazo e unha nova bomba de reloxería posto que se están ampliando uns xa enormes niveis de desigoaldade (España, xunto con Letonia, é o estado europeo con maiores niveis de desigoaldade).

Digo que é un efecto temporal por que os problemas de fondo das economías galega i española seguen aí: unh baixa crecente dos salarios reais e un elevado desemprego  que fan que se manteña débil a demanda agregada. Unha debilidade acentuada ademais por o elevadísimo nivel de endebedamento das familias –as hipotecas-, pola deflación, pola negativa dos bancos a conceder créditos as pemes (que, como dixen, son quen crean emprego) e polas políticas de axuste fiscal. Situacións todas elas que impiden un crecemento importante da demanda agregada elemento imprescindible, en España i en Galiza, para recuperar a senda do crecemento económico e a creación de emprego estable e sostido.

Manoel Barbeitos

domingo, 29 de marzo de 2015

Un sindicalista de pueblo

Cuando comenzaba la segunda mitad de la década de los setenta (del pasado siglo) yo era un reciente afiliado a la Unión General de Trabajadores y bastante joven. Además de leerme los estatutos, condición que antes era imprescindible, se nos había dicho que estaríamos a disposición de los dirigentes para las labores que se nos encomendasen. Así hice mi primera cala en el sindicalismo: me tocó ir a una pequeña empresa de confección que había a las afueras de mi ciudad, donde trabajaban unas ventitantas obreras muy mal pagadas. Debía pedir una entrevista con el dueño de la empresa (familiar) y hacerle ver que los tiempos que venían eran otros y las relaciones con los trabajadores debían cambiar. 

Yo me tomé la encomienda con muchas formalidades y debí darle al pequeño empresario la impresión de que se jugaba mucho atendiéndome, la prueba es que no me hizo esperar ni un minuto sobre la hora prefijada; me recibio en un despacho lleno de papeles mal ordenados, pequeño y algo mugriento. Le dije que había sido muy amable al recibirme y que estaba allí en nombre de un sindicato antiguo: la UGT. Él me dijo que algún ascendiente suyo le había hablado, cuando niño, de nuestra central y las actividades que llevaba a cabo, lo que me dio pie para decirle que debían celebrarse elecciones sindicales, que estas debían guardar ciertas formalidades y que las relaciones entre el comité elegido y él mismo debían ser fluidas y de colaboración. Unos meses más tarde (me etrevisté con el personaje dos o tres veces más) se celebraban las primeras elecciones sindicales en esa empresa con la UGT a la luz y el comité elegido estuvo íntegramente formado por ugetistas (todas mujeres). 

Poco más tarde tuve que ir -también por encargo de la dirección provincial- a una empresa de pollos donde los trabajadores (de ambos sexos) no tenian protección alguna y respiraban un polvillo malsano al desplumar a los animales; tampoco tenían guantes para la operación, por lo que sus manos estaban muy dañadas, trabajaban a altas temperaturas y hacían horas extras que no les eran pagadas. Los dueños (dos personajes fornidos y una señora que hacía de corrreveidile) me recibieron con expectación y desconfianza. Actué de la forma que me había dado tan buen resultado en el caso anterior, aunque en esta ocasión me miraban como un jovenzuelo al que no habría que hacerle mucho caso salvo que corriesen algún riesgo. Algo que pude comprobar es que estos empresarios desinformados, acostumbrados a incumplir la ley y a no pagar impuestos, desconfiaban de la verdadera fuerza que tuviesen los sindicatos entonces. Yo bien sabía que la fuerza era mínima, y que todo el trabajo estaba por hacer.

Con cierta rémora, también se celebraron elecciones sindicales y muy reñidas, pues se presentaron los de Comisiones Obreras, ya implantados en la empresa, y los de USO, que tenían a un representante certero y entregado. La UGT solo obtuvo un representante en el comité, pero eran pocos los que lo formaban. Los próximos meses y años fueron de contínuos conflictos con los dueños de la empresa de pollos, reacios a los nuevos tiempos, desconfiados y siempre proclives a incumplir la ley. Como las Magistraturas de Trabajo, entonces, estaban en manos de jueces de nula formación democrática, la cosa no fue fácil, pero aquellos trabajadores de la empresa de pollos terminaron siendo excelentes sindicalistas y contribuyeron a extender la UGT a otras empresas. 

En torno al año 1978 fui invitado para dar una charla a los trabajadores de una empesa maderera que ahora ha desaparecido (por la desaprensión de unos empresarios portugueses) y a los de la fábrica de pasta para papel que tantos quebraderos de cabeza ha causado a nuestra ciudad (sigo creyendo que los puestos de trabajo están por encima de cualquier otra consideración). La charla que había preparado versó sobre el sindicalismo en Europa, particularmente en Alemania y Suecia, sobre lo que yo había leído bastante y, además, habíamos tenido la visita de unos dirigentes suecos hacía unas semanas. Algunos de los trabajadores de las empresas citadas animaron muy bien el coloquio subsiguiente, pues habían tenido, no hacía mucho, familiares emigrantes en Alemania y Suiza. Sabían mucho más que yo sobre práctica sindical pero no sobre los logros del sindicalismo europeo. La cosa estuvo muy bien y siempre he recordado aquel episodio con agrado. 

En no pocas ocasiones viajé con otros compañeros por Galicia para ir formando núcleos ugetistas (y del Partido Socialista) en pueblos, ciudades y villas. En Chantada, una tarde-noche de invierno lloviendo a mares, en Tomiño, en Lavadores (Vigo), en Marín (el puerto) y en otros lugares. Llevábamos "El Socialista", lo que no siempre gustaba, pues muchos de nuestros interlocutores estaban por afiliarse a la UGT, pro no querían mezclarse "en política". Librábamos estas situaciones como podíamos. A finales de los años setenta ya estaban formados muchos comités de UGT, muchas agrupaciones, la representación sindical ugetista no tenía nada que envidiar a las otras centrales y las cosas iban sobre ruedas... salvo los despidos y sufrimientos que no se pudieron evitar. 

En el Congreso fundacional de la UGT de Galicia actué -pues así me eligieron- como Secretario de la mesa, redactado una extensa acta de las sesiones plenarias, incluido el discurso que pronunció Nicolás Redondo Urbieta y que consta en el documento que debe guardarse en la Fundación Luis Tilve. Un pequeño grano de arena por mi parte en una época llena de ilusiones y esfuerzos que no tengo en vano. 

L. de Guereñu Polán.

viernes, 27 de marzo de 2015

Cuarenta años de sindicalismo



Me refiero a los últimos cuarenta años del sindicalismo ugetista, desde cuando la vida del general Franco se agotaba hasta la actualidad; desde el XXX congreso en 1976, cuando dio comienzo el fin de la hegemonía de las Comisiones Obreras, que es lo mismo que decir del Partido Comunista de España sobre el movimiento obrero que defendía posiciones de clase.

Como había sido siempre, la Unión General de Trabajadores defendió la acción política además de la sindical en el seno de los centros de trabajo: no se concebía –y había razón para ello- que se luchase por mejorar las condiciones de vida de los asalariados y no por el cambio político hacia un estado social.

Luego comenzó un esfuerzo titánico por concertar acuerdos con gobiernos y patronales, sabiendo que las parcelas de libertad sindical conquistadas posibilitaban arrancar también mejoras para la población en su conjunto. Cuando el Partido Socialista accedió al poder por primera vez tras la dictadura, a finales de 1982, la Unión General de Trabajadores se planteó la necesidad de la autonomía sindical, lo que no fue entendido por todos. ¿Cómo iba la UGT a hacer seguidismo de las políticas gubernamentales cuando estas afectaban a intereses obreros? La necesidad de una reconversión industrial que hoy casi nadie pone en duda, trajo consigo, no obstante, una contestación sindical para conseguir que aquella se hiciese con las mayores garantías para los asalariados afectados: no siempre fue así.

Algunos eminentes ministros, sobre todo en el área económica, formando parte de gobiernos socialistas, actuaron más como burócratas que como representantes de la ideología a la que estaban adscritos. El ejemplo más sobresaliente en esta materia es el ya fallecido Miguel Boyer, quintaesencia de la soberbia en materia económica. Carlos Solchaga, en ocasiones, tampoco tuvo la sensibilidad necesaria para que el acercamiento a la UGT fuese posible, y entonces comienza un período de desencuentros que llevarían al desgaste mutuo, aunque por razones distintas. Incluso la presencia en gobiernos socialistas de destacados ugetistas como Manuel Chaves y José Luis Corcuera tampoco consiguió los frutos deseados.

Con todo, las décadas de los ochenta y noventa del pasado siglo son los de los grandes avances sindicales, los de las conquistas obreras en materias concretas, los de las mejoras de los salarios y las rentas, los de la extensión de los servicios sociales, muchas veces dados por los Ayuntamientos (con más recursos que nunca). Fueron los años dorados de la negociación colectiva, de las grandes afiliaciones y de la extensión del sindicalismo español hasta niveles parecidos a los de la II República española, tan distante en el tiempo y en las condiciones históricas.

Las últimas dos décadas, sin embargo, han sido de freno al sindicalismo no solo en España, sino en toda Europa. Algunas federaciones del sector servicios (educación, administración pública, sanidad, etc.) se han cuarteado, los “cinturones rojos” de las grandes ciudades se han desnaturalizado o muchos de sus individuos se han decepcionado ante retrocesos graves. La enorme tasa de paro que sufre España, lo que no es cuestión de ahora sino de siempre, contribuye al desánimo sindical de aquellos que ven una mayor preocupación de los sindicatos por los que tienen que trabajo que por los que no.

El logro de la patronal de establecer sistemas de contratación no estables, es uno de los factores más perniciosos para la afiliación y la lucha sindical, pues no se trata ya de conseguir mejoras en seno de la empresa, sino de mantenerse en ella el mayor tiempo posible, sin otros objetivos que quedan relegados ante la perentoriedad de aquel. Mientras el despido sea libre (en la práctica lo es), mientras la mayor parte de los contratados no sean fijos, mientras no haya seguridad en el empleo, mientras la patronal esté crecida –y lo está a nivel planetario- el sindicalismo tiene las alas cortadas, por muchos méritos que tengan y demuestren sus dirigentes y cuadros. ¿Estamos ante una nueva esperanza o ante la desazón más absoluta?

L. de Guereñu Polán.

LOS CUENTAN COMO OCUPADOS, PERO SON PARADOS, Y MUCHOS DE ELLOS OBJETO DE ABUSOS INTOLERABLES

La Encuesta de Población Activa (EPA) contabiliza como ocupadas a las personas que en la semana de referencia en que se realiza la encuesta hayan trabajado al menos una hora. En consecuencia, hace lo mismo con todos los que tienen contratos a tiempo parcial, aunque desean tenerlo a tiempo completo.

La mencionada encuesta no ha hecho públicos los datos sobre el porcentaje de empleados a tiempo parcial correspondientes al año 2014, aun que si publicó en diciembre de ese año los correspondientes a 2013 de los que se desprende que 2.717.300 personas (un 16% de los empleados) tenían entonces trabajos a tiempo parcial, y que de estos el 57,4% querrían poder hacerlo a tiempo completo. Es decir, eran subempleados, o “medio parados”. De manera que podríamos hablar de “empleados a tiempo parcial”, o también de “parados a tiempo parcial”. La cifra de 2014 me temo que será mayor, pues es una modalidad contractual en ascenso desde que el actual gobierno del Partido Popular impuso su reforma laboral.

El dato no es baladí pues estamos hablando de más de 1.500.000 personas ya entonces, un colectivo que, además, está siendo objeto de abusos tales como tener un contrato a tiempo parcial, pero trabajando la jornada completa o incluso mas, en muchos casos sin cobrar esas horas o cobrándolas en negro, es decir sin cotizar a la seguridad social y a un precio inferior al que corresponde legalmente. Un abuso y un fraude vergonzoso.

La Inspección de Trabajo tiene mucho que hacer y mucho que decir sobre esto. Un simple cálculo a la baja sobre las cifras publicadas del año 2013 y tomando como referencia las bases mínimas de cotización a la seguridad social, nos da un resultado de mas de 20 millones de euros al mes, o 250 millones al año como mínimo que la Seguridad Social deja de ingresar, aparte del daño social derivado para efectos de pensiones, prestaciones por desempleo, etc.

¿Por qué se soporta esto? ¿Por ignorancia? No, por necesidad y por miedo. Por necesidad porque hay miles de parados que ya no cobran  ningún tipo de ayuda o subsidio y aceptan lo que sea, y por miedo a ser despedidos si protestan o denuncian su situación. ¿Pueden hacer la denuncia los sindicatos? Si, pero si la concretan en una persona o empresa determinada pueden encontrarse con el rechazo del propio trabajador o trabajadora por temor a un despido fulminante, fácil y barato, que el sindicato no podrá evitar aún ganando la demanda por despido improcedente. Además, hay demandas que tardan años en resolverse por los Juzgados de la Social, y hay que comer todos los días.

Tiene que intervenir la Inspección de Trabajo y hacerlo sistemáticamente, levantando acta de infracción cuando proceda tras visitar los centros de trabajo una y otra vez, entrevistar a los empleados, revisar los contratos, las nóminas, las cotizaciones a la seguridad social y demás documentación  laboral. La inspección no puede quedarse en el despacho esperando a tramitar las denuncias que pueda recibir, porque no van a llegar, o lo harán muy excepcionalmente. Los defraudadores y explotadores lo saben y por eso se aprovechan, con el agravante de que la impunidad extiende cada vez más el fraude.

Esta es una parte del panorama que fruto de la reforma laboral impuesta por el gobierno de Rajoy y el Partido Popular estamos sufriendo. ¿Por qué siendo así no actúa la Inspección de Trabajo? Hay que preguntárselo y exigírselo en los parlamentos a la Xunta de Galicia y al Gobierno Central. Y, sinceramente lo creo, además, habrá que cambiar de gobernantes.

Xesús Mosquera Sueiro / 27 de marzo 2015





miércoles, 25 de marzo de 2015

LECTURAS POLÍTICAS (RAPIDAS) DAS ELECCIONS ANDALUZAS






Como sucede sempre nestes casos, e noutros parecidos, as recentemente celebradas eleccións andaluzas son obxecto de incontables análises, avaliacións, diagnósticos….. especialmente nos medios de comunicación e opinión. Tamén, como sempre, na maioría dos casos parecera que cada quén fale e opine dun acontecemento diferente dos outros. E co gallo de unirme a esa pluralidade de opinións e avaliacións aí van algunhas lecturas políticas (rápidas) que estas eleccións andaluzas me provocan:

1º. Unha ampla representación da cidadanía andaluza segue considerando ao PSOE como o mais eficaz defensor dos intereses das clases baixas e medias fronte as durísimas políticas de axuste fiscal e rebaixa salarial do PP. Seguen considerando que “non son o mesmo o PSOE e o PP”: un dato que tanto Podemos como Izquierda Unida deberan ter en conta.

2º. Dito o anterior, o PSOE –e moi especialmente Susana Díaz- non debera ignorar o feito de que son moitos mais os andaluces que non votaron ao PSOE        –preferendo outras opcións políticas- que quen o votaron: a súa esquerda sitúase un espectro moi amplo de andaluces que non deberan seren ignorados ou menospreciados. Moito mais cando non se conta cunha maioría absoluta que quedou algo lonxe.

3º. O “austericidio” que con tanta saña aplica o goberno de Mariano Rajoy é amplamente rexeitado polo pobo andalúz como así reflexa a devacle electoral do seu partido (PP). Un rexeitamento do que Mariano Rajoy, por mor da súa forte implicación na campaña, é un dos principais receptores.

4º. O mapa electoral andalúz experimenta un cambio moi relevante, faise mais plural, coa forte entrada en liza, e por vez primeira, de PODEMOS e CIUDADANOS. No caso de PODEMOS pasar de O a 15 deputados, sen case tempo nen para elexir candidatos nen para montar unha minima estructura, é un resultado espectacular e así deberano entender os seus dirixentes e os demais partidos. O mesmo se pode decir de CIUDADANOS aínda que os resultados foran mais cativos. En ámbolos dous casos so o futuro dirá ata onde pode chegar a súa influencia que, de todas as maneiras, é relevante e parece crecente.

5º. A devacle de IU debera facer reflexionar aos seus dirixentes. Non hai razóns para temer pola súa desaparición pero si aqueles deberan ter en conta varios elementos: a. A aparición de PODEMOS estalles quitando espazo de xeito moi rápido, b. As loitas intestinas son castigadas polos electores, c. Deben, dunha vez, clarificar tanto o seu proxecto político como as súas posibles alianzas e mesmo a súa forma orgánica.

6º. A pesares de teren contado cun goberno socialdemócrata (PSOE) durante moitos anos (33), Andalucía segue, dende o punto de visto económico e social, no furgón de cola na clasificación das comunidades autónomas españolas segundo o seu nivel de desenvolvemento. Un lugar que non parecera que vaia a abandonar.

 
Manoel Barbeitos Alcántara


 


sábado, 21 de marzo de 2015

Andalucía

En el tercer trimestre del año 2014 el PIB de Andalucía creció solo el 0,5% respecto del anterior y el 1,5% respecto del año 2013. En realidad no poco si lo comparamos con el 0,8% de la eurozona entre los dos años citados, aunque este último porcentaje representa mejoras superiores en términos absolutos, pues engloba a economías mucho más fuertes. Si tenemos en cuenta que desde 2008 hasta comienzos de 2014, el PIB andaluz había estabo bajo cero (casi en -4 durante 2009) se explica por que las tasas más altas de paro de España se dan en Andalucía, pero lo dicho no explica todo, pues dichas tasas de paro eran las más altas también cuando la crisis iniciada en 2008 no había hecho mella. 

El producto interior bruto andaluz a precios de mercado, hasta 2008, estaba por encima del de la eurozona y del de España en su conjunto (todos los datos que manejo son de la Secretaría General de Economía de la Junta de Andalucía: "Coyuntura Económica de Andalucía, número 93). Por otra parte, en el año 2014 se crearon en Andalucía 11.438 sociedades mercantiles en términos netos (creadas menos disueltas) lo que indica un dinamismo de la economía andaluza que no explica las tasas de paro sufridas. Es evidente que esas once mil cuatrocientas sociedades absorben muy poco empleo y además habría que ver el valor añadido que aportan a la economía en su conjunto, dato que en este artículo interesa menos.

El peso de la población andaluza en el total nacional ha ido en aumento y lo seguirá haciendo, según las prospecciones hechas, de manera que si ahora representa el 18%, en el año 2029 la población andaluza será el 18,4% del total de la española. Esto contribuye a que el paro se concentre en esta región sobre todo si su economía se sostiene con actividades donde aquel es estacional durante buena parte del año: la agricultura -olivar, fruta...- y hostelería-turismo. Además la población se concentra entre los 30 y los 65 años, es decir, demandante de empleo, contrariamente a las pirámides de Galicia y otras regiones de España, donde la población está mucho más envejecida. Un envejecimiento de la población andaluza no se prevé hasta el año 2064, lo que habla de una región ciertamente singular, mucho más que Cataluña y las provincias vascas en estos aspectos.

Por otro lado, donde más crecimiento económico se observa en los últimos años - en realidad ya desde hace décadas- es en los sectores industrial y servicios, cuando buena parte de la población andaluza no está cualificada, por lo que está mal pagada en dichos sectores. En otro orden de cosas la construcción -y esto no es una excepción andaluza- fue la que provocó el mayor desequilibrio de la economía en la región, por lo que permitir su hinchazón fue un error no solo de la iniciativa privada, que a la postre está a lo suyo, sino de las autoridades, que debieron impulsar modelos alternativos. Andalucía es una de las regiones de España con más viviendas sin vender. Esto ha provocado que el índice de precios de la vivienda en Andalucía haya descendido 15 puntos desde el año 2007, habiendo tocado fondo en el año 2012, que había descendido hasta 30 puntos: esto refleja la gran cantidad de personas que fueron expulsadas del sector (la mayor parte poco cualificadas) y se tuvieron que ir a la agricultura (que no absorbe ni mucho menos a todos) y a la emigración (otra vez los temporeros agrícolas en el sur de Francia).

El turismo también ha descendido desde al año 2000 (se encontraba en el índice 15) hasta el índice 5, con un mínimo en el año 2009 (índice -20). Seguir confiando en este sector no es bueno si tenemos en cuenta que las crisis cíclicas del sistema capitalista no perdonan, se producen cada cierto tiempo inexorablemente. Respecto al comercio, en el tercer trimestre del año 2014 las exportaciones andaluzas representaron el 17,1% del PIB, siendo la tercera comunidad autónoma más exportadora en dicho trimestre, lo que no es muy indicativo, pues se trata de la más poblada. Es cierto que comparado ese dato con el año 2013 las exportaciones crecieron un 9,1% en términos nominales, pues los precios descendieron un 2,9%.

Hoy el comercio "exterior" andaluz está neutralizado, pero durante todos los años de crisis la balanza comercial fue positiva, lo que quiere decir -a falta de reflexiones más sesudas- que el problema de la economía andaluza está en el siguiente trípode: la estructura de la propiedad agraria, el escaso desarrollo de su industria en términos relativos y la sobredimensión de los sectores agrario, construcción (hasta ahora) y turismo, que no generan empleo perdurable. Formar parte de España, donde los gobiernos no han sabido redistribuir la riqueza hasta el punto de que se han distanaciado rentas y patrimonios de los que más tienen con respecto a los que menos, hace el resto. 

L. de Guereñu Polán.

jueves, 19 de marzo de 2015

En política, ¿Puede haber violencia legítima? ¿De qué tipo y especie?


La historia ha demostrado que en ocasiones la violencia ha sido necesaria. En pleno siglo XXI hay más que indicios de su necesidad.

Los motores

Aún cuando este complejo tema surge de forma recurrente, impulsado por  unas circunstancias muy concretas, la teoría política contemporánea tiene dificultades para separar los hechos que la hacen necesaria, del Derecho que intenta evitarla o al menos moderarla. Los dos principales motores de la violencia han sido las religiones y el acceso y control de los recursos, es corriente que los impulsores  y dirigentes (no siempre son los mismos) utilicen una mezcla de ambos componentes en función de la sensibilidad de los actores que se manipulan y usan como meros peones en el campo de batalla. Intentaré analizar solo dos de las muchas circunstancias de actualidad: El intento de imponer un califato y la aceleración de la desigualdad hasta extremos inaceptables.

La raíz religiosa.

Respecto al primer tema, ni siquiera hay que acudir a un Maquiavelo que distingue entre una violencia reparadora, positiva y necesaria y renunciar a ella lo califica de insensatez,  y una violencia destructora. No, las justificaciones históricas que han tenido una raíz religiosa, en Eurasia incluso tienen símbolos: la cruz y la media luna.

Las justificaciones se encuentran con facilidad en algunos  filósofos  cristianos, en especial cuando monjes y otros religiosos se escandalizan por la depravación de algunos gobernantes, llegan incluso a convertir en tirano al dirigente que gobierna “por la gracia de Dios”,  generando una autentica contradicción de difícil superación racional. Un ejemplo, Santo Tomás sostiene “Cuando la tiranía es en exceso intolerable, algunos piensan que es virtud de fortaleza el matar al tirano”.   O, el jesuita Juan de  Mariana que cree de justicia asesinar al tirano que expropie injustamente y no se  sujete a  la “Ley Moral” (El rey y la institución real, 1598). Pero pueden encontrase ejemplos tan próximos como de los años 50 y 60 del pasado siglo, en la obra del Opus Dei, Camino, que sostiene que hay que “amar la guerra” y que “la santa intransigencia” es un instrumento de uso obligado.  Pero, en relación al problema que analizamos, desde hace algún lustro, en especial desde la llegada al papado del primer jesuita, no solo no se ha identificado a ningún tirano al que hacer sujeto de justicia,  sino que por el contrario el esfuerzo se dirige a ser un factor de equilibrio y paz, incluso para sus antiguos enemigos.

Es difícil encontrar  justificaciones claras en las fuentes clásicas musulmanas, ya que la guerra santa no es un precepto, por lo que ningún musulmán está obligado a participar de la acción militar. De hecho el Corán, libro sagrado de los musulmanes, no obliga, aun cuando  si anima, a los fieles a luchar contra los enemigos para defender la religión que se profesa, en especial si es como respuesta a una previa agresión. Por lo que la yihad de tipo terrorista que practica el E.I. debe tener alguna otra justificación, que inmediatamente encontramos en el otro componente: el del control de los recursos (las reservas de hidrocarburos). Teniendo en cuenta que aún cuando en boca de sus dirigentes el malvado tirano siempre es USA y por extensión Occidente, lo cierto es que la inmensa mayor parte de sus víctimas son correligionarios musulmanes.

Conclusión: la posible respuesta política solo puede ser útil si se acompaña del uso de una fuerza militar, que supere la que el E. I. utiliza, principalmente contra sus hermanos. En este caso el aserto de Maquiavelo  que renunciar a la violencia reparadora es una insensatez adquiere todo su valor y vigencia.

La raíz de la desigualdad.

La desigualdad extrema siempre ha generado violencia extrema, de los esclavos contra sus amos para emanciparse, de los siervos contra los señores, que les explotaban hasta el límite de la supervivencia para arrancar y consolidar derechos y libertades. La última crisis tiene arranque y justificación, primero en la superación del límite de desigualdad que el sistema global es capaz de digerir, pero segundo, y una vez superado el primer temor, los principales responsables que la desataron continúan ahondando y ampliando la desigualdad, hasta unos límites que hacen inevitable la reacción violenta de las víctimas, tan pronto tomen conciencia colectiva del proceso.

Ocurre, sin embargo, que la historia ha venido sustituyendo el derecho/deber del tiranicidio de convicción religiosa por otra doctrina, también compleja y difícil, pero más fácil de racionalizar a la que algunos teóricos llaman el “derecho de resistencia”. El derecho de resistencia de los ciudadanos al poder despótico se identifica con los alicerces (cimientos) de la Revolución Francesa y los procesos de independencia americanos. Incluso alguna constitución democrática reconoce expresamente ese derecho (Ley Fundamental de la Republica Federal de Alemania 1949). Por lo que una vez reconocida la licitud de una oposición activa al poder, poder que obligará a una resistencia violenta (por la buenas los que lo detentan no lo van a ceder), lo que queda por dilucidar es el carácter de los medios a utilizar, para que continúe siendo lícito su uso.

En Democracia el monopolio de la violencia se cede por los ciudadanos a los dirigentes elegidos y se ejerce en el respeto a unas formas determinadas. Lo lícito es que los ciudadanos impulsen una legislación, que puede ser todo lo dura que la relación de fuerzas de cada  momento permita.

Por ejemplo, los estados europeos (mejor el conjunto de la U.E.) en uso de su soberanía van a  tener que establecer en sus códigos penales como delictivo cualquier tipo de relación económica con los paraísos fiscales, ya que la experiencia demuestra que la totalidad de las personas físicas y jurídicas que las tienen lo hacen para la evasión fiscal. El que los dirigentes de las 35  empresas del IBEX español o las 40 del CAC francés, etc., hoy incurrirían en delito, es más que relevante de hasta donde ha llegado la necesidad de defensa activa por parte de los ciudadanos de a píe.

La famosa tasa Tobin no deja de ser un sucedáneo demasiado modesto e insuficiente, a pesar de lo cual la dificultad para que prospere demuestra lo inevitable de medidas mucho más duras si los ciudadanos quieren sobrevivir, alejándose de la nueva servidumbre que les expulsa del bienestar al que tienen derecho.

El radical control e incluso la prohibición de un instrumento, aparentemente inocuo, pero que tiene en su haber más muertes por hambre que el conjunto de las guerras hoy activas, como los mercados de futuro de alimentos, la presencia pública en  sectores estratégicos de la economía: energético, transporte, alimentario, comunicaciones y nuevas tecnología, etc. continuarían la lista de las batalla a ganar, en un terreno que han convertido en tan religioso como el Islam, los adoradores del dios mercado.

Si, en esas batallas es lícito el uso de una violencia política legitimada por Leyes democráticas.

Marzo de 2015

Isidoro Gracia

miércoles, 18 de marzo de 2015

RECORTES Y MAS RECORTES, PERO LA DEUDA CRECE MAS Y MAS

Rajoy recibió un país con una deuda pública a finales de 2011 de 734.962 millones de euros, equivalentes al 68,5% del PIB. Poco más de tres años después, a comienzos del 2015, la deuda pública de España asciende a 1.035 BILLONES DE EUROS, lo que supone el 97,8% del PIB, y no parece haber tocado techo.

Con el porcentaje de deuda del gobierno de Zapatero se dispararon entonces todas las alarmas, se pusieron en circulación los más gruesos calificativos y los más negros augurios. Con la deuda como pretexto el gobierno de Rajoy procedió a recortarlo todo (inversiones públicas, prestaciones sociales, salarios, derechos laborales, pensiones, etc.) a impulsar la privatización de servicios públicos básicos como la sanidad y la educación, y a subir impuestos a todos menos a los ricos (IVA, copagos, tasas incluso para acceder a la justicia, etc.) Y, ¿Cuál es el resultado? ¿Acaso esa mal llamada política “de austeridad” ha servido para reducir aquella escandalosa deuda? Pues no, sino todo lo contrario, la deuda se ha incrementado en solo tres años ¡en un 43%! Pero ahora, curiosamente, ni el FMI, ni la OCDE, ni la Comisión Europea, ni el Banco de España, ni los gabinetes de estudios de los bancos españoles, ni siquiera las famosas agencias de calificación (Estándar & Poor´s, Moody´s, Fitch, etc) dicen ni pio, a pesar de que ahora la deuda es mucho mayor.

Los intereses anuales que toca pagar por la deuda contraída también han subido. De los 12.000 millones de euros de 2011 hemos pasado a ¡35.000 millones! en los Presupuestos Generales del Estado para 2015. A cada español le tocan 22.252 euros de deuda pública. Si a la deuda pública le añadimos la deuda privada, la deuda externa española alcanza la cifra de 1,7 BILLONES DE EUROS, mas del 161% del PIB, según datos del Banco de España.

Por lo que respecta a Galicia su deuda pública alcanzó a finales de 2.014 los 9.961 millones de euros, el equivalente al 18% del PIB regional. Son 748 millones mas que a finales del 2013, un incremento del 8,1%. Cuando en abril de 2009 Alberto Núñez Feijoo sucedió a Emilio Pérez Touriño como Presidente de la Xunta, la deuda pública de la comunidad autónoma era por entonces de 3.954.000 euros, el 6,8% del PIB regional. Durante su mandato, y mas todavía desde la llegada del Partido Popular al Gobierno de España a finales de 2011, el Presidente Feijoo se autoproclamó ejemplo a seguir en políticas de austeridad, con recortes durísimos en materia de sanidad, educación y servicios sociales, e incluso reduciendo el número de consellerías y suprimiendo todas las delegaciones provinciales de las mismas. Sin embargo el resultado en materia de deuda publica es el mencionado: En cinco años la deuda publica de Galicia se ha incrementado ¡en un 152%! en cifras absolutas y ¡en un 165%! En porcentaje del PIB regional.

En los ayuntamientos la tónica es parecida, o incluso mucho mas grave en algunos casos. Por el volumen de su deuda destaca Madrid, seguida de Barcelona, Valencia, Zaragoza, Málaga, Jerez de la Frontera, Sevilla, etc. Hay excepciones como por ejemplo el ayuntamiento de Bilbao que se aproxima a la deuda cero, lo que pone de manifiesto que el margen para una mejor gestión existe.

Por lo que respecta a Galicia el Ayuntamiento de Vigo con una deuda pública de 15,9 millones de euros dice encaminarse igualmente a la deuda cero y presume de ser uno de los mejores de España en cuanto a gestión económica. No es el caso del de A Coruña donde la corporación municipal que preside el actual alcalde Carlos Negreira, recibió en 2011 de la anterior corporación presidida por Javier Losada, un ayuntamiento con una deuda pública de 74.702.640 de euros, a finales de 2013 la deuda publica consolidada según lo publicado en la propia página Web del ayuntamiento ascendía a 96.860.930 euros, un incremento en tres años de 22.158.290 euros, un porcentaje próximo al 30%.

La deuda es un durísimo lastre y una amenaza permanente sobre la economía y sobre la propia soberanía del país. Los datos someramente expuestos hasta aquí ponen de manifiesto el absoluto fracaso de las políticas de recortes y “austeridad” llevadas a cabo hasta ahora. La situación no ha mejorado sino que ha ido a peor en todos los parámetros incluidos los del empleo, población activa y ocupada, condiciones de trabajo, etc. Ha crecido la pobreza hasta niveles dramáticos y alarmantes, y la emigración vuelve a ser la única salida para la gran mayoría de nuestros jóvenes. Con estas políticas no podemos seguir porque caminamos cara a un desastre cada vez mayor por mucho que toneladas de propaganda nos quieran hacer creer lo contrario.

Xesús Mosquera Sueiro / 18 de marzo 2015
  



AS DÉBEDAS PÚBLICAS: ORIXE E CAUSAS

Co gallo da oposición do goberno grego (Syriza) a seguir as receitas neoliberais  (“o austericidio”) que a troica (BCE, CE e FMI) e o goberno alemán intenta impoñer nos países da eurozona e, moi especialmente, nos países europeos periféricos, un vello axioma política (“as débedas hai que pagalas”) volve a seren utilizado co gallo de xustificar estas políticas noeliberais que están esnaquizando o Sur de Europa: estes estados –Grecia, Portugal, España….- viviron por riba das posibilidades, gastaron más do que teñen, endebedáronse e….. agora deben pagar por elo. Deben pagalas súas débedas. Que hai de verdade ou de estafa neste asunto?.


Analicemos o caso dos tres estados citados –Grecia, Portugal, España- empezando pola orixe das respectivas débedas públicas. Unhas débedas públicas que supoñen –decembro 2014-, respectivamente o 176%, 131,5% e 97,7% dos correspondentes PIB. En termos reais: 315.509, 228.360 e 1.033.857 millóns de euros en cada caso. Unha débeda que, importante detalle, disparouse coa crise e as durísimas políticas de axuste fiscal que se aplican nestes estados: no ano 2008 as débedas ascendían ao 109,3% do PIB (264.623 millóns de euros) en Grecia, 71,7% (128.191) en Portugal e 39,4% (392.168) en España. Os incrementos das débedas públicas foron xa que logo de: 66,7 puntos do PIB en Grecia (50.886 millóns de euros), 59,8 en Portugal (110.169) e 58,3 en España (641.689). Quizás sexa oportuno sinalar que a débeda pública tamén medrou en estados de Alamana (do 64,9% ao 74,8%: 9,9 puntos) e Francia (do 67,8% ao 95,3%: 27,5 puntos) aínda que fora en menor proporción.


O primeiro que hai que subliñar é que estes tres estados –Grecia, Portugal, España- teñen unha característica fiscal común: unha moi baixa presión fiscal por mor de que as rendas do capital apenas pagan impostos e defraudan moito sendo as rendas do traballo o soporte central da facenda pública. Os tres estados antes do estoupido da crise tiñan unha presión fiscal (Grecia: 34,4% PIB, Portugal: 37,8%, España: 37,9%) inferior a media europea (UE 27: 40,9%) pero un nivel de fraude fiscal moi superior (Grecia: 27,5%, Portugal: 26,8%, España: 22%, UE27: 18%). Unha presión fiscal que descansa maiormente nas rendas do traballo. Un fraude fiscal que, nestes estados, en case un 75% procede das rendas do capital.


Unha situación que se agravou por mor da crise e as políticas de axuste fiscal que se aplicaron con enorme dureza nestes tres estados: ao dispararse o desemprego (Grecia: 25,8%, Portugal: 13,3%, España: 23,4%, UE27: 9,8%) caeron de xeito drástico os ingresos fiscais por mor das seren as rendas do traballo o principal soporte das facendas públicas nestes tres estados. Velaí a falacia do argumento neoliberal sobre os déficits e as débedas públicas nestes tres estados: estes derivan, en parte, dun sistema fiscal regresivo cuxos efectos negativos agudízanse coa crise e as políticas de axuste fiscal. O elevado desemprego da clase traballadora, e o seu impacto negativo sobre os ingresos fiscais, foi unha das causas do crecemento das débedas públicas nestes tres estados (Grecia, Portugal i España). Pero non foi a única: o fraude fiscal medrou coa crise e tamén medrou o gasto público –por dúas razóns fundamentais: o lóxico incremento do gasto derivado do crecemento do desemprego e, o menos lóxico, o rescate bancario que derivou na transformación en débeda pública o que era unha débeda privada-.


Estes países teñen outro problema estrutural que afecta as arcas públicas: son estados que, por mor da súa condición de periféricos, importan mais do que exportan o que deriva nunha elevada débeda externa. Unha condición de estados periféricos que se intensificou coa actual política monetaria que mantén o BCE pensada mais en favorecer aos estados europeos do norte que aos do sur: con unha moeda tan forte como o euro estes estados teñen difícil reducir os seus deficits. Con balanzas de pagos claramente deficitarias (Grecia: 28,5%, Portugal: 60,5%, España: 66,9%, UE: 93,5% como taxas de cobertura no ano 2008 previo a crise) estes estados non teñen mais remedio que endebedarse. En definitiva balanzas fiscal e de pagos deficitarias –por razóns diversas- facilitan as débedas públicas destes países ao tempo que desmenten as teses interesadas de que sexa o elevado gasto público a causa da elevada débeda pública.


En relación a isto último –gasto público- compre subliñar que segundo datos da OCDE estes tres estados estaban, e seguen estando, na cola de Europa en canto a gasto público social: Grecia (46,6% do PIB), Portugal (48,3%), España (42,9%), Eurozona (49,3%).


Por si isto non fora suficiente está a política monetaria da UE co BCE como primeiro director. Como é ben sabido o BCE –a diferenza doutros bancos centrais como a Reserva Federal, o Banco de Inglaterra…- non financia directamente aos estados –coa compra directa dos seus títulos de débeda- senón que acude ao mercado secundario actuando dun xeito maquiavélico e tremendamente prexudicial para os estados periféricos: préstalles diñeiro aos grandes bancos europeos a taxas moi baixas de xuro -0,25/0,5%- que logo aqueles utilizan para especular contra as débedas soberanas dos países europeos do Sur –esixindo uns xuros que poden chegar ao 5/6% e incluso superiores- encarecendo o seu financiamento e, xa que logo, provocando un incremento das débedas públicas (xuros e amortizacións).


Finalmente está a débeda privada e a conversión dunha parte da mesma en débeda pública. Cando estoupou a crise o principal problema financeiro destes tres estados –e pódese dicir que de toda a Unión Europea- era a débeda privada. Unha débeda privada moi elevada –Grecia: 92% do PIB, Portugal 300% e España: 357%- na que o peso da débeda do sector financeiro propio era moi alto –Grecia: 21% PIB, Portugal 145%, España: 152%,– e que, en conxunto era moi superior a pública, agás no caso grego –Grecia: 152%, Portugal: 86% e España: 53%-. Posteriormente os rescates bancarios e os plans de flexibilización cuantitativa fixeron que unha parte moi relevante da débeda privada dos bancos fora transferida as arcas públicas converténdose deste xeito en débeda pública e pasando a incrementar o volume da mesma.
Velaí as causas das elevadas débedas públicas dos estados europeos do sur    –Grecia, Portugal, España-. Unhas causas que, de ningures, son as de que os cidadáns destes estados, especialmente os de rendas medias e baixas, viviran por riba das súas posibilidades senón que derivan basicamente de catro feitos: 1. A súa condición de periferia no seo da Unión Europea, 2. A política monetaria fixada polo BCE, 3. A política comercial tamén fixada polo BCE e 4. A política fiscal destes estados. Feitos que teñen que veren tanto coa defectuosa creación da UEM –que se fixo por e para as finanzas e o capital comercial alemán- como co poder de influencia desas mesmas finanzas tanto en estes tres estados como na toma de decisións da troica (BCE, CE, FMI). Feitos que non fan mais que reflectir o marco actual da loita de clases a nivel europeo.


MANUEL BARBEITOS ALCÁNTARA

domingo, 15 de marzo de 2015

BALTASAR GARZÓN PODRÍA VOLVER A LA JUDICATURA

La Asociación de Magistrados Europeos por la Democracia y las Libertades (MEDEL) que agrupa a 15.000 magistrados y fiscales de once países, ha pedido  al Gobierno Español el indulto de  Baltasar Garzón. Es seguro que el actual gobierno del Partido Popular no atenderá esta petición, pero también lo es que el ejecutivo que preside Mariano Rajoy parece tener los días contados.

Cierto que un nuevo gobierno puede no tener fácil el poder hacerlo. Primero porque a tenor de lo que vaticinan las encuestas será fruto de los pactos tácitos o expresos entre diversas fuerzas políticas, lo que puede obligar a establecer prioridades no siempre coincidentes entre sus integrantes. Segundo, porque podría suponer un enfrentamiento fuerte y abierto con los órganos del actual Poder Judicial, responsables en gran medida de la expulsión de Garzón y muy próximos al gobierno actual, y que el Partido Popular ha concebido y diseñado como una decisiva palanca política.

Aún así, el nuevo poder político y el nuevo  gobierno que llegue a este país tras el nefasto mandato del PP y de Rajoy, tiene en la Justicia una asignatura pendiente. Algo importante que el Ministro Gallardón lejos de mejorar agravó hasta el punto de verse forzado a dimitir. La Justicia es cuestión principal y mas importante que la cuestión económica por ejemplo aunque no lo parezca, pues sin  justicia todo crecimiento económico puede ser baldío e inútil para los ciudadanos mas desfavorecidos o que viven en la pobreza y carentes de los derechos mas elementales fruto precisamente de una injusta e inadecuada distribución de la riqueza del país.
La cuestión judicial es un asunto pendiente en la democracia española pues no fue adecuadamente resuelto durante los años de la transición. El empeño del Partido Popular en tratar de resolver por la vía judicial los asuntos de pura y simple naturaleza política no ha hecho más que retorcer la voluntad democrática de los ciudadanos en cuestiones importantes y poner en evidencia el problema de fondo: Un sistema judicial dependiente y cautivo del poder político. Recientemente se ha hecho público un informe del Foro Económico Mundial, también conocido por Foro de Davos, que, tras las reformas de Gallardón coloca a España al nivel de Irán en materia de independencia judicial.

Los polémicos nombramientos de los últimos integrantes del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo. La expulsión del Juez Elpidio Silva por el caso Bankia/Miguel Blesa. Las abiertas presiones sobre el juez Castro por el caso Palma Arena, las presiones y manipulaciones habidas sobre los jueces intervinientes en la Gurtel después de Garzón en Madrid y en Valencia. Las presiones y maniobras sobre el Juez Gómez Bermúdez y otros, son muestras recientes de una realidad que la ciudadanía percibe como grave y preocupante desde hace tiempo y  que se ha agravado en los últimos años. Las severas limitaciones impuestas por el gobierno del PP al principio de Justicia Universal que han supuesto ya la excarcelación de mas de medio centenar de importantes narcotraficantes condenados y presos, y la paralización de otros juicios relevantes en marcha, abundan gravemente en la deplorable realidad de la justicia en nuestro país.

Con seguridad que ha sido la expulsión del Juez Garzón de la carrera judicial después de haber sido señalado y acosado por el Partido Popular en represalia por el Caso Gurtel y por su actuación contra los crímenes del franquismo, el hecho que ha situado a la Justicia española en su mayor nivel de descrédito internacional. La petición de los jueces y fiscales europeos que piden su indulto así lo pone de manifiesto. Las pruebas de solidaridad con Garzón procedentes de ámbitos judiciales y políticos de toda Latinoamérica también lo corroboran.

El nuevo gobierno de España tiene en le reforma y renovación del sistema judicial tal vez uno de sus mayores y mas importantes desafíos. Y para que esa reforma sea creíble dentro y fuera de España, puede ser imprescindible que algunos atropellos sean reparados por la vía del indulto, aunque los todavía poderosos residuos del franquismo que perviven en nuestro sistema judicial se puedan oponer a ello con todas las fuerzas a su alcance.

Xesús Mosquera Sueiro / 15 de marzo de 2015



viernes, 13 de marzo de 2015

A BANCA ALEMANA: UNHA ARMA DE DESTRUCCIÓN MASIVA?


        Dende fai algúns anos, especialmente dende que estoupou a crise financeira, as elites alamanas (maiormente os banqueiros e os dirixentes políticos) non paran de dar consellos aos demais gobernos europeos, sobre o que deberan ou non deberan faceren, e incluso chegan mais aló: soltan reprimendas, broncas, regáñenas moi especialmente aos cidadáns dos países europeos periféricos polo noso “mal comportamento” causa, segundo eles, dos nosos problemas.

Dende o xa manido argumento de que “vivíamos por riba das nosas posibilidades”, ata isto de que “non facemos ben os deberes”. E póñense así mesmos –políticos, banqueiros, empresarios….- como exemplo de cómo hai que facelas cousas.

Pois ben, a realidade non é tal e como eles no la presentan ou nola queren faceren veren. Así por caso voume a referir a conduta dunha das institucións alamanas “mais respetadas” e tamén “mais poderosas”: o Deutsche Bank. Un banco privado adalide do austericidio que con tanto rigor quere aplicar a troica (BCE, FMI e CE) nos países europeos periféricos. Un banco privado cuxo comportamento financeiro –xunto ao doutros grandes bancos europeos- fai que, nembargante, algúns pensemos que a Unión Europea conta no seu interior con auténticas armas de destrución masiva que de estoupar a vítima principal pode que sexa a propia UE. Motivos para este temor hainos polo que ben faría esa elite alamana en coidar mellor a súa propia casa antes de meterse na dos veciños.

Como xa dixemos noutro texto o Deutsche Bank –“un banco universal”- é un dos bancos mais grades do mundo si nos fixamos nos seus balances (coñecidos). Segundo os datos mais fiables o valor dos seus activos equivale ao 85% do PIB alemán –moi por riba dos 2 billóns de euros-: preto de 2 veces o PIB español. Como o resto dos grandes bancos a súa actividade principal é a especulación –e non a concesión de créditos a familias, pemes ou entidades públicas-. Mantén altísimos niveis de apalancamento (50%) e os seus fondos propios xiran en torno ao 2% dos seus activos –rateo de apalancamento-, polo que está sempre sorteando a creba –con ese nivel de apalancamento e con un volume de préstamos elevado, 50% do capital, entraría en creba-. Este banco (DB) ao igual que o resto de grandes bancos posúe como activos unha grande cantidade de produtos financeiros que son auténticas bombas de reloxería (alta rentabilidade/alto risco). Ao igual que o resto de grandes bancos acostuma a asumiren altos riscos por estaren convencido de que en caso de perigo o estado alemán –e a Unión Europea- acudirá sempre no seu auxilio (“too big too fall”).

Este banco ocupa un lugar privilexiado no mercado de commodities –que especulan con os alimentos e as materias primas- provocando con os seus métodos especulativos brutais escaladas nos prezos dos alimentos con  gravísimas consecuencias para os países pobres como pasou nos anos 2007 e 2008 con millóns de persoas pasando fame mentres este banco obtiña, grazas a esas subas, enormes ganancias.

O Deutsche Bank tamén intervén no mercado cambiario (15,2% do mercado) igualmente para especular: o DB foi un dos grandes bancos mundiais (15) que participou, no ano 2013, na manipulación do mercado cambiario mentres os bancos centrais facíanse os suecos –entre eles o BCE e o Bundesbank-: tal foi o escándalo que finalmente o DB sería multado pola Comisión Europea.

O relato das “aventuras financeiras” deste modélico banco -que, non debemos esquecelo, é un dos principais soportes non so da CDU e o goberno conservador alemán senón tamén do Bundesbank e, como consecuencia, do BCE eixo central da troica- daría para unha grande novela de terror. Un modélico banco que, nembargante, é obxecto constante de multas e investigacións en todo o mundo polas súas “malas prácticas” sen que nin o Bundesbank, nin o Ministerio de Facenda –e, xa que logo, o goberno alemán- fagan outra cosa que pechalos ollos.

Segundo o Financial Times –periódico pouco sospeitoso de seren inimigo dos bancos- nos derradeiros anos o Deustche Bank ten aparecido involucrado –amais das operacións xa citadas anteriormente- en operacións de manipulación dos prezos da electricidade (California), nunha montaxe fraudulenta de venta de certificados de emisións de CO2, na manipulación dos prezos de venta do ouro e a prata, en grandes operacións de evasión fiscal e de manipulación de contas, en branqueo de diñeiro (Dubay) e corrupción –con condenas de directivos- de clientes de fondos de pensións (Xapón)….

Compre deixar moi claro que o Deutsche Bank non podería desenvolver esta exemplar traxectoria sen a complicidade, ou cando menos o silencio do goberno alemán, o Bundesbank e o propio BCE. Claro que estes están moito mais preocupados polo comportamento do actual goberno grego (Syriza) do que confían “non faga promesas ilusorias que o país non se pode permitir e que continúe coas reformas estruturais que se necesitan sen poñer en cuestión o conseguido deica agora” (J. Weidman presidente do Bundesbank).

Como se pode veren a desfachatez desta elite alamana –como a súa homóloga europea- non ten límites.
 
Manoel Barbeitos

CÓMO MALGASTAR FONDOS EUROPEOS

Hai quince meses, o Presidente da Xunta anunciaba un intercambio de estudantes galegos con Portugal, no marco da cooperación existente. Sería un programa de becas, semellante ó Érasmus, dotado con 400 euros mensuais durante un trimestre. Tamén estaban previstas axudas para estadías de profesores. O programa estaba financiado por Bruxelas con 300.000 euros,  a medio dos fondos POCTEP precisamente dirixidos a esa cooperación transfronteriza. Pouco tempo despois declaracións oficiais adiaban indefinidamente a participación de estudantes mentras.


Ata hoxe teñense realizado duas convocatorias cos mesmos criterios.Un terzo docentes, un terzo persoal de administración universitaria e o terzo restante, investigadores. Reciben unha axuda de custo para gastos de desprazamento e estancia. Con criterios clasistas. Así, docentes e administrativos reciben 800 euros por estadías de unha ou duas semanas, mentras os investigadores recibirán 600 euros mensuais ata un máximo de tres mensualidades.Cabe pensar que os investigadores viaxan a pé, pernoctan en albergarias ou se alimentan ocasionalmente. En todo caso indica a consideración que ese colectivo merece ó goberno galego. O mesmo goberno que ten creado unha Axencia de investigación na que non hai investigadores.

Conscientes da febleza do programa, non hai avaliación do resultados, nin control de calidade. Abonda presentar unha memoria para xustificar o pagamento. É difícil pensar en resultados para estadías dunha semana que, según a convocatoria,  "terán que ser congruentes co plano de investimentos da eurorrexión, producir beneficios para o desenvolvemento tecnolóxico ou a mellora da competitividade das Pemes ou da protección do medio ambiente, ou da mellora da capacidade institucional da eurorrexión". Demasiada literatura burocrática para tan cativa acción.


Lonxe de ser un mal exemplo, ese programa caracteriza unha boa parte da xestión do goberno galego. Nin os datos de crecemento económico se corresponden cos discursos, nin o funcionamento dos servizos públicos ten nada que ver coa propaganda incesante. Galicia non ten política exterior recoñecible, algo diferente dunha sucesión de viaxes oficiais sen contido e lóxicamente con mínimos resultados. A cooperación con Portugal anota máis discursos que feitos mensurables.
José Luis Mendez Romeu

LA IMPRESCINDIBLE MOCIÓN DE CENSURA AL GOBIERNO DE RAJOY

La situación política hace imprescindible una Moción de Censura al Gobierno de Rajoy.
Se perderá en el Congreso, pero se ganaría, primero entre la ciudadanía y más tarde en las múltiples elecciones previstas en el calendario de este año.

Y según mi opinión, que el gobierno esté presidido por una persona que ha mentido en todas y cada una de sus propuestas programáticas, que sus grupos parlamentarios afines estén en dedicación plena de evitar los controles democráticos básicos, en clarísima burla de una legitimidad ya perdida, o que el partido que les apoya, tenga que dedicar la mayor parte de sus esfuerzos  a la defensa penal de muchos de sus más importantes responsables (incluidos miembros del gobierno,  ya veremos si en un futuro próximo incluso el mismo presidente) no es el motivo más importante para realizar la Moción de Censura. No, el motivo más importante es su intención de consolidar sus “logros” mediante la elaboración de los Presupuestos Generales de 2016.

Para Pedro Sánchez, el único líder político en posición de poder presentarla, deben ser valorables otras circunstancias, entre las cuales la primera es la de defender los derechos de los sufridos ciudadanos, arrebatando la iniciativa política a quien solo utiliza la suya al detrimento de derechos básicos, y no solo me refiero a la sanidad o la educación, sino a lo que afecta a la calidad de la Democracia, hasta el punto de limitarla tanto, que como hace la llamada “Ley Mordaza” daña los derechos de libertad de opinión y de manifestación, llevando al país de una Democracia imperfecta al borde de un sistema deslegitimado.
Pero también es valorable que el calendario le es favorable, por ejemplo en el tema de la extendidísima corrupción en el PP, si intentan justificarla con el “tú más” con los ERES, al margen de que para una persona informada resulta evidente, que la mayor parte del problema (quizá el 90% o más) solo se sostiene en la muy ideologizada mente de la juez que lo impulsa y su entorno, las elecciones andaluzas van a relativizar muy notablemente el valor del daño. Por otra parte un político limpio, como el mismo se encargó de proclamar, puede perfectamente aceptar reproches, hacer critica y proclamar las medidas que si se han tomado contra los corruptos del PSOE, frente a la defensa a ultranza de los que aún militan en el PP, llegando a la destrucción de pruebas y a la negativas de colaboración con jueces que la solicitan.

Los resultados de las Elecciones Andaluzas también van a relativizar y rebajar la importancia de la referencia de los partidos emergentes, y si la Moción se presenta antes de las Elecciones Municipales y Autonómicas esos resultados, si se confirman las encuestas conocidas, pondrán de manifiesto la importancia del peso de un proyecto con historia frente a alternativas de otros por conocer (y que al día de hoy se resisten a explicitar sus propuestas concretas).

Algunos de los 202 diputados de las elecciones de 1982, se ganaron en la Moción de Censura previa, que transmitió el mensaje de que había propuestas concretas diferentes a las del gobierno de entonces, al tiempo que trasladó de campo la iniciativa política y sirvió de anuncio de la existencia de alguien que se atrevía a asumir la responsabilidad de dirigir el País.

Cierto es que, eso exige presentar públicamente un programa de gobierno coherente, lo que implica un cierto riesgo, pero no es menos cierto que no usar las oportunidades de tomar la iniciativa ,en los momentos oportunos que brinda el calendario, también tiene costes de oportunidad, e imagen.

Pero ante todo y sobre todo, la Oposición tiene la obligación democrática de dificultar que el Gobierno actual condicione el futuro del que surja de las próximas Elecciones Generales. Sin olvidar que la nueva situación obligaría a los partidos catalanistas a “retratarse” previa y públicamente, en un proceso en el que sus intenciones e iniciativas pasan a un segundo plano, con una importancia también secundaria.

Marzo de 2015

Isidoro Gracia

jueves, 12 de marzo de 2015

TAMBIEN EL EJERCITO, EN MANOS DEL PP, SUFRE DAÑOS EN SU IMAGEN.


Un  reportaje de Jordi Évole nos refiere descarnadamente  la historia de una capitán del Ejército que vio cómo su vida y su carrera militar se iban a hacer puñetas por el acoso enfermizo y descerebrado de un superior suyo, el teniente coronel ISIDRO JOSÉ DE LEZCANO-MÚJICA. Este sujeto, indigno del uniforme en el que embosca su miseria moral, sumó a sus ataques libidinosos hacia la capitán, el acoso laboral.  Este “héroe”  de opereta, con el honor en las estrellas (esas tan lejanas que resultan inasequibles), ejerció su “heroica vocación militar” babeando por los rincones para acosara y agredirla cuando esta no se doblegó a sus indecentes propósitos o le informa que va dar parte de los mismos a sus superiores.  La Institución militar cuando la oficial da el difícil y valiente paso de poner en conocimiento el comportamiento desenfrenado del teniente coronel ISIDRO JOSÉ DE LEZCANO-MUJICA, en lugar de escuchar y amparar a la ofendida, zanjando de forma expeditiva y legal el tema,  mira al tendido primero y, luego pone  la maquinaria  en son de desprestigiar y humillar a la capitán. Sin que falten la coacción, las amenazas, mentiras y denuncias falsas. El estamento militar empeñado en tapar las vergüenzas llega hasta el extremo de llamar a la diputada Irene Lozano (UPyD), para exigirle garantías de que dejase de hacer “ruido político” con el caso…Previamente le habían puesto toda clase de dificultades por el camino. Sobre esa misma cúpula militar recaen sospechas de alentar con escasa sutilidad órdenes a sus subordinados para poner pintadas amenazadoras contra la capitán…

Si la cobardía permitiese a este individuo participar en misiones internacionales, ¿qué garantía tiene España de que su prioridad no sea el acoso sistemático de las ciudadanas de los países donde se interviene aprovechando su situación de desvalimiento?. ¿Es esto lo que deseamos cuando nuestro Ejército sale al exterior? Cuando este sujeto vuelva a ponerse el uniforme ascendido a coronel por el gobierno, el compadreo de su ministro del ramo y las amplias tragaderas del PP… ¿lo hará antes o de después de estudiar sus antecedentes psiquiátricos para saber si  ha corregido su patología enfermiza de acosador de aquellas que considera débiles por sus circunstancias concretas, y por ello de pisoteables en orden a su rango y condición de género? ¿Este es el ejercito que todos deseamos hoy, cuarenta años después de  la dictadura militar y  una transición, con  “ruido de sables” y el intervencionismo más grosero sobre “temas civiles”?  ¿Esta es la “política militar que la derecha española de Rajoy, capitaneada  por su sector más extremista nos quiere legar?. En cuanto a este sujeto, ¿no sería mejor enviarlo a Valladolid con el alcalde León de la Riva, como jefe de su policía local?  Seguramente habría una magnifica sintonía entre estos dos especímenes que deshonran al hombre como ser normal y equilibrado.

La insultante realidad, un motivo más de indignación entre las muchas indecencias y atropellos que inundan esta monarquía bananera, la muestra este delincuente condenado a 2 años y 10 meses,  por abuso de autoridad y trato degradante, en Alcalá Meco. La sentencia quizás no sea casualidad, como casi nada lo es…Con la doctrina militar dos meses más le hubieran significado salir de la carrera militar. El delincuente convicto, ISIDRO JOSÉ DE LEZCANO-MÚJICA,  ha sido premiado por el PP y su hombre en Defensa, Morenés, con el empleo de coronel. La agredida, acosada y perseguida, hoy comandante,  se irá a la calle.  El jefe de la monarquía bananera, a la vez Capitán General de los Ejércitos, jefe supremo de los mismos,…no dice ni pio...Los altos mandos castrenses menos, y menos todavía, el ministro Morenés,  sujeto muy conocido en el negocio de las armas y que promovió a general al muñidor del tema. El, es el gran encubridor y responsable político.

Si nadie actúa con decencia en el caso, el descredito recaerá injustamente sobre toda la Institución. La militar acosada  manifestaba en una declaraciones: “Ésa es la cúpula militar que tenemos (y que yo estoy convencida de que no nos merecemos), cúpula en la que no todos, pero sí muchos son cobardes, y se parapetan bajo un uniforme y se llaman patriotas. Enarbolan la bandera mientras escalan en sus carreras. Poco importa que se aprueben injustas normas ad hoc para favorecer a los de siempre... Se cometen atropellos contra la dignidad y los derechos de las personas. Ellos podrían cambiar las cosas, pero les conviene mantenerlas como antaño.

Mi historia termina así, con mi adiós a las armas, mi despedida de una profesión que amo (...). Creo que es la primera vez que un militar se atreve a contar su historia aportando nombres y apellidos de "compañeros" en activo para poner caras a los culpables. Lo hago, en primer lugar, porque creo que hay que denunciar a los responsables, porque hay muchos militares honrados dejándose la piel, y hay que diferenciarlos. En segundo lugar, porque no todos somos iguales ante la ley, pero tampoco ante la corrupción, el servilismo...

Tengo la firme convicción de que el Ejército español necesita un cambio importante, necesita una reestructuración orgánica y de mentalidad para conseguir una mayor operatividad (...), pero, sobre todo, se necesitan verdaderos líderes que lo dirijan. Que el cumplimiento de las leyes y la transparencia entre a raudales en esta oxidada estructura, porque el Ejército necesita rejuvenecer.

Supongo que me queda por oír muchas veces la cantilena de "Ya sabías lo que había cuando ingresaste" o "Si no te gusta, vete". Por mi parte, sigo considerándome una verdadera patriota que ama a su país y cree en la necesidad de unas Fuerzas Armadas eficaces.

Cuando decidí denunciar a Lezcano, supuse que mi trayectoria profesional se vería afectada y que, probablemente, tanto José (su esposo) como yo nos veríamos privados de destinos o de cursos por "habernos enfrentado al sistema", pero nunca imaginé que la injusticia triunfaría de tal modo. No me voy, me han echado (...). Asumo que tendré que empezar de cero y no pienso rendirme para ser feliz".

El Ejército de España, tras un largo camino de reconciliación con la sociedad, no se merece, ni ciertos políticos ni ciertos mandos militares. Dice el todavía ministro Morenés, que se ensucia el nombre de las FFAA… No ministro es usted quien lo ensucia. Ascendiendo a coronel a apologetas del golpismo que lo celebran en unidades militares con paella…Haciendo generales a quienes no se privan de hacer política desde su mando…Ocultando trapos sucios y siendo cómplice de sus autores…Usted ministro, el gobierno al que pertenece y algunos mandos que frívolamente promociona para no se sabe que espurios intereses…Eso si enlodan la imagen de unas FFAA modernas y con vocación democrática. FFAA en las que la inmensa mayoría de sus miembros se distinguen de forma ejemplar en sus misiones, y en los diversos escenarios que cubren, merecen cariño y respeto.   
Antonio Campos Romay