lunes, 29 de junio de 2015

Más Unión Europea o vuelta a un pasado trágico.


A un par de generaciones vista: ¿Cuántos pasos puede dar Europa hacia conflictos como los que marcaron su pasado sin llegar un punto sin retorno?

Analizar cualquier proceso europeo en clave local y a corto plazo, como lo que está pasando con Grecia, incluso los cambios de políticas económicas y sociales, sea cual sea la magnitud del cambio, ocultará la importancia y/o gravedad de lo sucedido.

La Unión Europea es algo más que una mera suma de Estados, es una creación que tuvo y aún tiene (o debería tener) como primer objetivo salvar a la propia civilización europea del colapso, al que se vio abocada por las continuas guerras entre vecinos.  Esto lo vieron claro, no solo los padres fundadores de la C.E. sino dirigente relativamente próximos, en términos históricos, como Kolh, Mitterrand, o Felipe  González, incluso alguien tan poco pro Unión como Thtacher. ¿Cómo es posible que sus actuales herederos en las funciones de gobierno hayan perdido esta perspectiva?

Los estudiosos de la historia han elaborado herramientas que permiten, al amparo de múltiples experiencias anteriores, prever en qué dirección se van a mover los acontecimientos futuros, si no se corrige el rumbo con las decisiones políticas oportunas, y con los medios, no siempre agradables, adecuados. A principios de los años 60 del pasado siglo hubo un trabajo que es de aplicación casi directa: Estudio de la Historia, de Toynbee. En él se ordenan las fases de cómo civilizaciones, que han dado lugar a Naciones e incluso  Imperios de muy larga duración, nacieron, crecieron, colapsaron, se desintegraron y fueron sustituidas por otras, en ocasiones filiales de ellas mismas.

Según las experiencias estudiadas, a la fase de colapso, consistente en la incapacidad de dar soluciones a los problemas de sus ciudadanos sigue inevitablemente la desintegración. El colapso produce un cisma en el cuerpo social, cuerpo social que, según la obra de referencia, se fracciona en una minoría dominante, un proletariado interno y un proletariado externo.

Las políticas aplicadas en la UE para dar solución a una crisis generada por la perfectamente identificable minoría dominante, ha  permitido el crecimiento incontrolado del proletariado interno: parados, estafados, desposeídos de vivienda y servicios públicos, explotados laborales, dependientes privados de ayuda, etc. Y la falta de una política exterior mínimamente coherente ha dejado llegar hasta las mismas puertas de Europa a una gran masa de proletariado externo, con el añadido que esa masa tiene un elemento de cohesión poderoso, su religión, diferente a las mayoritarias en Europa.

A juzgar por los últimos resultados, la sociedad europea, o al menos sus actuales gobernantes,  está dispuesta, de forma muy mayoritaria, a continuar la desenfrenada carrera hacia nuestra ruina, aún cuando, al menos hasta la fecha, el no muy antiguo militarismo ha sido sustituido por el intervencionismo económico, empujando a pueblos y estados hacia un neoliberalismo convertido en religión, hasta un integrismo que antepone el bienestar de los billetes de banco y las entidades que los acumulan al de los ciudadanos.

Respecto a cómo van a repercutir los resultados en las elecciones futuras, lo cierto es que, al margen de lo nombres de las nuevas fuerzas políticas, al final todo se simplifica en tres o cuatro términos: conservadores, progresistas, nacionalistas y extremistas. Las alianzas con cierta estabilidad quedan así también reducidas a alternativas muy concretas y/o  de los  cambios que esas alianza promuevan, y los cambios tienen que ser importantes, del abandono de las políticas austericidas y de cambiar la atención y decisiones, desde el confort del sector financiero al bienestar de los ciudadanos de a píe, en especial a los desfavorecidos, dependerá si nazis, neonazis, xenófobos, neofascistas y tribalitas varios, continúan empujando hacia la repetición de la historia de conflictos abiertos durante siglos en esta casa que aún es común, a pesar de la ceguera de los actuales dirigentes.

A la vista de los últimos acontecimientos, una última cuestión sin respuesta clara: ¿Mis nietos seguirán viviendo en una Europa en paz?

Junio de 2015

Isidoro Gracia

viernes, 26 de junio de 2015

¿Nueva estructura de partidos en España?

Quizá sea pronto para hablar de una nueva estructura de partidos pero todo parece indicar que los dos grandes partidos nacionales van a quedarse muy por debajo (electoralmente) de los apoyos que han tenido en las últimas décadas y parte de sus votos van a engrosar los apoyos de otros ¿partidos? que parecen colocarse a uno y otro lado del espectro político (otra cosa son Euzcadi y Cataluña). Parece que la extrema derecha quedará refugiada en el Partido Popular (aquí nunca hubo una "Acción Francesa" con su nivel intelectual) y que la izquierda más definida estará en el Partido Socialista, mientras que otra izquierda nebulosa encontrará su sitio en la nueva organización que parece ha cuajado trampeando aquí y allá con candidaturas muy poco definidas en cada Ayuntamiento y en cada Comunidad Autónoma. 

No tengo datos que avalen lo que voy a decir sobre Izquierda Unida, pero en principio me parece que no desaparecerá electoralmente (otra cosa será lo que hagan con dicha organización sus dirigentes). En todo caso hay un cierto parecido en la actual situación española con la que vivió Francia antes y después de la segunda guerra mundial. En primer lugar en Francia el concepto "partido" no siempre tuvo el mismo significado que en España, mucho más definido aquí, y allí -leí en alguna ocasión- la derecha tenía vergüenza de calificarse así, disfrazando su lenguaje (en realidad, igual que en España). Desde que en 1944 Georges Bidault fundó el Movimiento Republicano Popular (lo de "popular" siempre tuvo en Europa claras connotaciones) dicho partido tuvo un gran éxito, pero no rebasó el 28,1% en las elecciones de 1946 (algo que puede pasar en España ahora y ser un éxito para quien lo consiga). Luego este partido se dividió entre quienes apoyaron a la OAS terrorista contra la independencia de Argelia y los que siguieron al general De Gaulle, fundador de la V República.

En las elecciones de 1951 vino el éxito de Antoine Pinay y sus candidaturas "de centro", como quiere el señor Rivera, pero ya el general De Gaulle había fundado el R.P.F ("Reagrupamiento por la República"), que no deseaba un régimen de partidos, sino donde estos tuviesen que ponerse de acuerdo para sostener a un verdadero poder centralizador, el del Presidente de la República (el mismo centralismo del señor Rivera). No cuajó en Francia un partido de la "democracia cristiana", cuando sí en Alemania, Italia y algunas repúblicas latinoamericanas, como tampoco cuajó nunca en España, porque la CEDA fue un partido definido por su defensa de los intereses católicos, cosa muy distinta. Por cierto, no deja de ser curioso que el partido del señor Rivera en el Parlamento Europeo se encuentre en el mismo grupo que Convergencia de Cataluña (liberales) ¡Cousas veredes! Creo que la aspiración a representar los mismos intereses económicos pesa más que estas o aquellas veleidades nacionalistas (catalanistas en un caso, españolistas en el otro).

La socialista SFIO (Sección Francesa de la Internacional Obrera) desaparecida a finales de los años sesenta pasados, tiene menos que ver con el Partido Socialista Obrero Español que el reunificado por François Miterrand, pero antes de que el nuestro haya dejado escapar parte de su electorado a "cosas" que todavía no entiendo bien. En lo único que se diferencia la actual estructura de partidos actual en España (si se confirma lo que se apunta en el horizonte) con respecto a la Francia a la que me estoy refiriendo, es la existencia de un fuerte Partido Comunista, más implantado en los barrios obreros y en las fábricas que beneficado por las elecciones una y otra vez (en España el Partido Coumunista nunca tuvo la importancia que en Francia). 

Solo encuentro un parecido del ¿partido? del señor Iglesias en la actual Italia: ese movimiento "Cinco Estrellas" que creo está llamado a estrellarse a poco que se den cuenta los italianos que con populismos baratos se puede vivir en otros lares, pero no en Europa (al menos del oeste). 

L. de Guereñu Polán.

UN PUEBLO MAS SERIO QUE SUS DIRIGENTES

El pueblo español es bastante más serio que sus dirigentes. Y  es consciente de ello. Lo recogen las encuestas de forma terca. Es tenaz la desconfianza entre la ciudadanía y sus presuntos servidores. Y una de sus grandes preocupaciones. Una brecha que disparó la crisis poliédrica que se abatió hace casi un lustro sobre las costillas de los más inocentes. Es algo que  no tiene correspondencia con lo habido en los países de nuestro entorno. Ni el grado de desconfianza en sus políticos, ni en la calidad de su democracia es equiparable. Seguramente la primera reflexión es que tampoco en el ejercicio democrático y en la pulcritud del desempeño de las tareas públicas, alcanzamos la media del espacio común que compartimos.

En consecuencia,, es cada vez es más difícil para los que desde las bambalinas hacen oficio, practicar el viejo truco de cambiar lo accesorio para que nada cambie en lo sustancial. Los espectadores –la ciudadanía-, cada día afinan más, aceptan menos juegos malabares y ponen en evidencia las fullerías...

Hoy ya no se acepta sin un grave menoscabo para la credibilidad institucional, las serias dudas sobre la aplicación de una justicia, que se percibe comprometida en su imparcialidad, que aparenta manejar sus tiempos, o elegir a los juzgadores a mayor gloria de los presuntos corruptos, sin que a ello sean ajenas las artimañas de un gobierno totalitario, entendido esto, como mayoría total en las Cámaras. Un gobierno que promueve cruzadas contra ciudadanos de signo contrario, los discrepantes, simplemente por serlos. Haciendo viga de un twiter en ojo ajeno, mientras hace creer que son pajas en los suyo, cuando están llenos de impudicia  y zafiedad.

Tampoco acepta ya la ciudadanía, las burdas maniobras de la prensa adicta sobreactuando en busca del voto perdido de los amos, anunciando urbi et orbi la devolución del dinero saqueado de las nominas del funcionariado, para al cabo de un momento desdecirse en  un si pero no, por boca del Sr. Montoso. Al que en su carencia de sensibilidad, ni por la cabeza le pasó que lo primero que tendría que reponer, es la dignidad y el honor de los trabajadores públicos tan vilipendiados por el y por el coro de  dinamitadores del estado de bienestar. Ni es tolerable ese personaje que como gobernador del Banco de España, viola con impunidad y cinismo sus competencias, para convertir una comparecencia parlamentaria, en un programa promocional de fondos de pensiones privados, erosionando la confianza en el sistema publico.

Los diversos territorios del Estado, en mayor o menor medida, cada vez son menos  proclives a las milongas de ese grupo que se aúna en torno a sus “intereses creados”. En tiempos de incertidumbre, el pueblo aprendió a velocidad de crucero, que el peor miedo es el temor al miedo. Y tiene claro la necesidad de enviar al estercolero, intemperancias como las del Sr. Guerra, “el que se mueve no sale en la foto”,  o el chantaje al ejercicio de las libertades públicas que comporta “la Ley Mordaza”.  

Frente a los que predican el crepúsculo de las ideologías, alumnos tardíos del difunto Sr.de la Mora, e instan campanudos a obligados sometimientos embozados en “pactos de estado” para no sacar los pies del tiesto si se anhela compartir el pastel, surgen nuevas voces, irreverentes y díscolas que lo ponen en solfa y reivindican la ética y el vigor de las ideologías. Y lo hacen arropados con el aplauso de disconformes e indignados, y desde los sectores más  varipintos.  

La Transición un acierto innegable para salir de un impasse donde el espectro de la pasada guerra civil helaba los corazones, muestras graves fisuras por las que se desliza con impertinencia y soberbia una oligarquía pancista y el férreo mensaje de que nadie altere el sosiego del pesebre nutricio de la banca y de los especuladores globalizados…El dictador afirmó que lo dejaba atado y bien atado…A diferencia de sus colegas Salazar y Caetano, como era monárquico, (y también mas inculto), conculcando la Ley de Sucesión de la Monarquía, nos legó un rey…Un mal hijo, que obediente al padre político, no dudo en negar al padre natural… Lo que Franco ató, no lo desató la democracia… Por ello no hubo necesidad de la nadería de un referéndum para que el pueblo español, -iletrado para tomar tal decisión-, se pronunciase, -de forma concreta y no obligado por un texto general- en orden a si quería una Monarquía o una Republica.  Ya lo había decido el dictador. Y para darle forma, estaban los Siete Sabios de Grecia y las doctas  mentes aulicas…La cosa se quedo en Transición y todo debidamente aliñado en un pack llamado Constitución. Por cierto muy  saludable cívicamente en la mayor parte de su articulado, aunque su cumplimiento deje más lagunas de las deseables.

Descontando las bondades de la Transición, y de la senda democrática formalmente abierta, hoy, es cada vez mayor la cantidad de ciudadanas y ciudadanos  que comienzan a estar más que hartos de que la democracia se asocie con opacidad, con venalidad, con incompetencia…Que la corrupción, el soborno, la dilapidación de los fondos públicos, y con ello los derechos civiles y sociales alcanzados penosamente se desvanezcan en la hoguera de administraciones y administradores sumamente reprochables. Y que la democracia se estreche reducida a una cita cuatrienal con una urna…

Muchos sectores ciudadanos se impacientan con una ley electoral impulsada por la UCD, escudada en la Ley D´Hondt, que reiteradamente distorsiona el sentido del voto, beneficiando injustamente a unos partidos en detrimento de otros. O favoreciendo a las provincias más despobladas… Se percibe la necesidad  de rescatar de los aparatos partidarios las listas electorales, abriéndolas a sus propietarios legítimos, los ciudadanos. Y  limitar los mandatos, para refrenar las ansias de convertir la política, en vez de  un servicio al común, en  un servirse indefinidamente del común.

También, el esperpento vivido en la Diputación de Lugo, es una llamada al sentido común en la administración local. Las diputaciones son órganos anacrónicos cuya utilidad, como el Senado, es apenas acomodar intereses, en ningún momento interesantes para la ciudadanía. Y al tiempo, reordenar y unificar desde la racionalidad  un gravoso censo de municipios absolutamente inoperantes.


Hay quien tiende a ver hoy el escenario político, con el mismo desasosiego que Amadeo I de Saboya durante su efímero reinado: “Ah per Baco, io no capisco niente. Siamo una gabbia de pazzi”…”No entiendo nada. Esto es una jaula de locos”… Otros en su miopía, ni los cambios de decorado perciben…Los hay que optan por enrocarse en el mantra de plegarias centradas, banderas gigantes, pasillos floridos de lis…otros en el reclamo de un éxito económico tan falso como los crecepelo de los años 50, o haciendo cosmética de juventud sobre cerebros escleróticos…Todos sin entender, y menos afrontar con inteligencia, algo que no tiene marcha atrás…Algo que se canturreaba un 25 de abril del siglo pasado por las calles lisboetas…o povo e quem mais ordea… Y que al fin, tras un largo letargo,  ese pueblo, está dispuesto a creérselo y exige ser protagonista…

Antonio Campos Romay

Os pobres e a política

Por moito que M. Rajoy e A. Núñez Feijoo quéirano negar resulta indiscutible que tanto as eleccións europeas últimas –maio 2014- como as recentes eleccións municipais e autonómicas –maio 2015-, con sucesivos débalos electorais do PP, puxeron moi nerviosos aos dirixentes populares que ven como o seu “reinado” toca ao seu fin e por vontade popular.
Un dos feitos mais indicativos é que agora, ámbolos dous mandatarios, e os seus respectivos gobernos, pareceran por fin lembrarse daqueles que mais están sufrindo as consecuencias do “austericidio” que están aplicando e a quen viñan ninguneando en todos estes anos de soberbia política. Agora pareceran aceptar, din estar sensibilizados, de que en Galicia i en España hai familias que o están pasando realmente mal, moi mal pois están “en risco de pobreza”.
Vexámolos datos mais fiables: segundo fontes oficiais (INE) as persoas en risco de exclusión chegan ao 29,2% en España e ao 23,8% en Galiza. Cifras que por si soas xa deberan sementala alarma dos gobernos respectivos que terían que estaren dedicando unha atención especial a esta tremendo problema. Unha alarma da que so parecen tomar nota logo das débalos electorais reflectidos pero dun xeito tan pouco crible que realmente dan a seguridade de que seguiran sen faceren ren importante. Este xuño, inmediatamente despois das eleccións municipais, A. Núñez Feijoo presentaba un “plan de loita contra a desigualdade social” pero sen a correspondente dotación económica.
Son moitas as razóns que explican esta falta de sensibilidade por parte do Partido Popular deica as familias que están “en risco de pobreza i exclusión”, que son pobres. A primeira é mais evidente: os pobres non son noticia na maioría dos mentireiros políticos e mediatices. Mentres a débeda ou o déficit público, os problemas financeiros, a inflación e, incluso, o desemprego e agora a corrupción, por razóns obvias, son noticia non se fala das familias pobres aínda que “se lles poida teren simpatía, incluso compasión”. Pero nin M. Rajoy nin A. Núñez Feijoo discuten da política, das medidas que sería necesario adoptar para rematar con esta lacra, para axudar a moitas familias a saír da pobreza na que caeron.
Outra das razóns mais evidentes e a de que semella que M. Rajoy e A. Núñez Feijoo nunca se viron persoalmente expostos a pobreza. O mesmo sucede coa maioría dos directivos e dirixentes do Partido Popular: a verdade é que igual pasa con cada vez mais dirixentes políticos galegos i españois entre os que son esmágante maioría os procedentes das clases de rendas medias e altas. Cada vez hai menos representantes políticos procedentes das clases traballadoras onde a pobreza golpea con mais forza.
Unha mais das razóns deste abandono das familias pobres por parte deses dirixentes e que non parecera que sexan quen de entender de que rematar coa pobreza esixe un grande esforzo público e, xa que logo, de fondos públicos. Que non é verdade que medrando o PIB acábese coa pobreza como mantén a ideoloxía neoliberal. Que no sistema capitalista –i España está sendo un exemplo paradigmático- pode medrar a economía e o mesmo tempo medrar as desigualdades e a pobreza. Pero si que é certo que naqueles estados onde mais desenvolvido está o estado de benestar, onde mais recursos públicos empregan as administracións públicas nas funcións de benestar, é onde hai menos familias pobres. Aínda así M. Rajoy e  A. Núñez Feijoo non parecen entender, por exemplo, que esnaquizando a sanidade e o ensino públicos están colaborando a que medre, e se enquiste, a pobreza.
Claro está que para aliviar algo a súa conciencia, e a moi baixo custo, sempre introducen nos seus orzamentos públicos –tanto no Goberno español como na Xunta de Galiza- algún programiña, algunhas actuacións que teñen como beneficiarias as familias pobres: “un xeito de aliviar a conciencia liberal i económica a baixo prezo” como diría o meu admirado profesor J. K. Galbraith. Pero son medidas de tan curto alcance e baixo orzamento que, de ningures, rematan co problema. Medidas que, ademais, son froito dunha concepción da pobreza, e das familias pobres, moi peculiar e propia das clases de rendas altas.
Estas clases pensan que dar diñeiro aos pobres é unha mala política, un erro estratéxico, un prexuízo moral e social. Estas clases pensan que as familias que son pobres sono maiormente por que os seus membros non queren traballar, non por que non haxa ou escasee o emprego. Velaí que, para esta clases de rendas altas, sexa prexudicial darlles diñeiro as familias pobres pois remataran preferindo recibir ese diñeiro público sen esforzo en vez de traballar o que vai en prexuízo do propio sistema económico ao crear familias dependentes.
Resulta curioso como estas clases avalían os perigos dunha conduta “ociosa” segundo cal sexa a orixe social de quen a práctica. Cando se trata dos pobres falan dun perigo moral e social pero cando son os ricos estes “son admirados, non condenados. Aprenderon a vivir a boa vida. Contribúen como patrocinadores a distinción artística ou literaria do país e ditan normas de estilo e de comportamento persoal louvadas e incluso celebradas pola súa novidade, variedade i extravagancia. Ninguén ou moi poucos critican o seu abandono.
A posición do pobre é moi diferente. Neste caso os ingresos inmerecidos considéranse prexudiciais tanto moral como socialmente especialmente pola inactividade a que poden dar lugar. Ditos ingresos e dita inactividade non se perdoan nin sequera cando é evidente que non se dispón de oportunidades de emprego alternativas. O que se gaba nos ricos condenase severamente nos pobres” (“Unha viaxe pola economía do noso tempo”. JOHN KENNETH GALBRAITH).
  


Manoel Barbeitos Alcántara.

POLÍTICA EDUCATIVA

Unha constante da política conservadora é a reducción constante do gasto público en sanidade, educación e servizos sociais. Mesmo existe un compromiso explícito do Goberno Rajoy con Bruxelas,  para continuar esa reducción ata 2018. No caso do ensino, logo de acadarse un nivel histórico do 5% sobre PIB co goberno Zapatero, tense rebaixado ó 4% e para 2018 será do 3´7%. A maior baixada entre os países da Unión Europea.

Os conservadores teñen fixación negativa co ensino. Sempre que gobernaron, recortaron en equidade, gratuidade e gasto publico. En Galicia reduciron 321 millóns de euros cada ano. Aprobaron a LOMCE, hoxe cuestionada por 12 Comunidades Autónomas, para implantar barreiras como as reválidas ou os itinerarios prematuros. E suprimiron a gratuidade dos libros de texto a 80.000 estudantes, o 60%, para implantar un sistema máis caro e burocrático. Porque o importante era sustituir a universalidade polo cheque, pola dependencia. Agora anuncian unha nova modalidade de cheque por valor de 40 euros. Cada familia mendigando a esmola, casualmente en período electoral. En lugar de incrementar a progresividade fiscal, ésta  reducese en beneficio das rentas máis altas e perxudicando ás rentas medias e baixas.

Os servizos para pobres adoitan ser servizos pobres. Non serven para paliar a pobreza sinon para perpetuala. Porque clasificar é segregar. De ahí a defensa dos servizos universais e gratuitos no ensino e na sanidade.

Os estudos máis recentes comenzan a cuestionar a equidade do sistema educativo español e a poñer de manifesto a estratificación social presente nos centros de ensino en función da sua titularidade: pública, concertada ou privada. En detrimento dos centros de titularidade pública. De onde a necesidade de revisar o actual sistema de financiamento para introducir obxectivos mensurables que reduzan a desigualdade de resultados académicos, correlacionada coa estratificación social. Un motivo máis para cambiar de goberno.

José Luis Mendez Romeu

jueves, 25 de junio de 2015

Reflexión sobre la actual ética política



La abundancia de dirigentes estoicos, solo de boquilla, empieza a ser preocupante.

Las últimas intervenciones del presidente del banco de España, siguiendo instrucciones de otros más altos, e incluso algunos discursos éticos de los “nuevos políticos” copian a Séneca.

El presidente del banco de España insta a los jóvenes a ahorrar para sus pensiones futuras, a los trabajadores a bajar sus salarios en aras de una competitividad mal entendida, el presidente del gobierno invita, desde hace demasiado tiempo, a la mayoría de los ciudadanos a sacrificar parte de su salud y de la educación de sus hijos, para consolidar un sector financiero que permita crecer la economía y así crear de empleo, la calidad de este no entra en la receta. Por último la ínclita presidenta del FMI avisa a la población en general que llegar a viejo y seguir viviendo pone en peligro los equilibrios macroeconómicos.

Al parecer copian al cordobés y estoico Seneca, que como es bastante conocido decidió que su papel en la vida consistía en proveer de un código ético a los líderes del imperio, eso si después de pasar unos años en el destierro por cometer algún hecho que, incluso en su permisiva sociedad, se consideraba sancionable. La mayor parte de sus obras se destinan a ensalzar y predicar las virtudes que deben  adornar a un dirigente para lograr la felicidad de su pueblo. Tan excelsos y atractivos resultaron sus escritos que el cristianismo adopto como parte de su propia doctrina algunos elementos del espiritualismo senequista.
El problema surge al comparar sus prédicas y consejos hacia los demás, en especial sus propuestas morales destinadas a los jóvenes, con lo que practicó durante sus muchos años como gobernante, años en los que se dejó tentar por el dinero (fue acusado apropiarse de millones), el poder y los placeres, en contradicción con lo que declaraba públicamente y exigía a sus conciudadanos y resto de dirigentes.

Igualito, igualito, que las teorías de ahorro, moderación en las remuneraciones, necesidad de renuncias del bienestar propio en aras de un bien solo teóricamente común, y del sacrificio de buena parte de un honesto retiro si la existencia se alarga, que llegan a imponer el presidente del Banco de España, el del Gobierno y la presidenta del FMI, casan mal con las subidas continuas del salario del primero, las remuneraciones “extras” del segundo, el exorbitado sueldo de la tercera y los planes de pensiones con cargo a sus administrados de los tres.

Habida cuenta de la situación de los instalados en la cumbre, se hace relativamente explicable su posicionamiento  desde la perspectiva del ya muy anciano Seneca: “si el estado está tan corrompido que no existe posibilidad de salvarlo, es de sabios evitar esfuerzos vanos”. Pero menos explicable y preocupante es que los recién llegados no practiquen para sí mismos y los más próximos lo que predican para los demás, con ánimo de sustituirlos en la gobernanza de lo público.

Los mismos “nuevos” dirigentes que reclaman a los de los partidos clásicos la expulsión de todos los imputados (sin matices) dejan en sus puestos a los propios, porque “solo” se le imputa un delito por faltar al respeto a otros conciudadanos que militan en una fe diferente, en este caso religiosa (Podemos), o admiten como suficiente un escrito en que el afectado dimitirá si es condenado (Ciudadanos). O por poner otro ejemplo de dualidad ética, exigen la retirada por tener demasiada historia a personas significativas de otra militancia, y olvidan que ellos mismos tienen una dilatada aunque poco conocida  trayectoria (casi toda la cúpula de Podemos) y algunos tan poco santa como provenir de la extrema derecha (algunos cabezas de lista de Ciudadanos, incluido el líder). Y por terminar sin hacer mucha sangre, reclaman el mayor respeto a las formas democráticas, al tiempo  que usan de prepotencia y falta de modestia hacia los demás y liquidan por las buenas a los críticos internos (el buen uso de la Democracia exige el respeto al adversario, no digamos ya a los propios militantes)  o la inclusión en sus listas de personas que no han dado el consentimiento. Creo yo que la ética tiene más espacios de aplicación que el bolsillo o la cuenta corriente, de hecho este ámbito siendo importante no está por encima del respeto a las ideas de los otros.

Como el cordobés del siglo I, la teoría sobre las virtudes del servidor público: aprobado, incluso bien o notable, en el tema las praxis: necesitan mejorar. Eso suponiendo que no se piense ya en evitar esfuerzos vanos.

Junio de 2015
Isidoro Gracia

miércoles, 24 de junio de 2015

HIMNOS E BANDEIRAS


Unha masa enardecida silbou a emisión do Himno Nacional de España nun recente partido de fútbol. A seriedade dalgunhas autoridades contrastaba coa indisimulada satisfacción doutras, reproducindo así o que acontecía na grada. A liberdade de expresión ampara tamén a crítica ós símbolos. Coa presenza das bandeiras nos edificios públicos acontece algo semellante.

Nun libro de grande interese, “Mater dolorosa”, Álvarez Junco analiza a formación da España moderna a partir da guerra da Independencia e o fracaso da creación do Estado liberal. En "Ser españoles", obra colectiva esos asuntos son estudiados polo miudo. A realidade é que os símbolos nacionais, himno, escudo e bandeira, non gozan do respaldo masivo que teñen noutros países. A dictadura transformounos en símbolos de parte e non de todos. Catro décadas máis tarde ese carácter variou pouco. Así Pedro Sánchez tivo que ofrecer explicacións por terceiras persoas por ter utilizado como fondo dun discurso a imaxe da bandeira do Estado.

Certamente os símbolos non resisten unha análise racional. As letras de moitos deles, da Marsellesa ó propio himno galego, teñen expresións que hoxe chamariamos "políticamente incorrectas". Son artefactos históricos e así hai que consideralos. Coas suas contradiccións internas e os seus siñificados ambiguos, por exemplo o Santo Grial do escudo galego malia o carácter aconfesional do Estado actual. Unha excepción notable e rompedora, é a letra do himno da Comunidade de Madrid, escrito por Agustín García Calvo,  que por razóns obvias apenas se coñece. A sua lectura excusa comentarios:
Yo estaba en el medio:
giraban las otras en corro
y yo era el centro.
Ya el corro se rompe,
ya se hacen Estado los pueblos,
y aquí de vacío girando
sola me quedo.
Cada cual quiere ser cada una:
no voy a ser menos:
¡Madrid, uno, libre, redondo,
autónomo, entero!
Mire el sujeto
las vueltas que da el mundo
para estarse quieto.

Yo tengo mi cuerpo:
un triángulo roto en el mapa,
por ley o decreto
entre Ávila yGuadalajara,
Segovia y Toledo:
provincia de toda provincia,
flor del desierto.
Somosierra me guarda del Norte y
Guadarrama conGredos;
Jarama y Henaresal Tajo
se llevan el resto.
Y a costa de esto,
yo soy el ente autónomo último,
el puro y sincero.
¡Viva mi dueño,
que sólo por ser algo
soy madrileño!

Y en medio del medio,
capital de la esencia y potencia,
garajes, museos,
estadios, semáforos, bancos,
y vivan los muertos:
¡Madrid, metrópoli ideal
del Dios del Progreso!
Lo que pasa por ahí, todo pasa
en mí, y por eso
funcionarios en mí y proletarios
y números, almas y masas
caen por su peso;
y yo soy todos y nadie,
político ensueño.
Y ése es mi anhelo,
que por algo se dice:
"De Madrid al cielo".

José Luis Mendez Romeu

martes, 23 de junio de 2015

"Contribución al problema de la vivienda"

Varios artículos de Federico Engels se refirieron a este asunto ya en la segunda mitad del siglo XIX, consciente el autor de que el desarrollo de la industrialización y la tendencia a la concentración del capital, depauperaba a amplias capas de la población dejándolas en la peor de las condiciones. Como Engels no era un charlatán sino un observador muy preocupado por los problemas sociales, comprobó que en algunas ciudades industriales inglesas el problema de la vividna no existía, porque cuando se construyeron los equipamientos para las industrias se construyeron también viviendas para los trabajadores. Esto no era una novedad, pues algunos socialistas utópicos habían sido partidarios de actuar de esta manera y el mismo Robert Owen se puso manos a la obra en New Lanark (Escocia). 

Engels vio que las ciudades que organizaron su crecimiento industrial, particularmente en Inglaterra, los mismos dirigentes políticos -donde no había ni un solo obrero- consideraron la necesidad de dotar de viviendas a los que trabajasen en las fábricas. Pero muchos dirigentes políticos actuales no han visto esta necesidad cuando redactan los planes de ordenación urbana. En realidad el problema es el mismo, pues la afluencia de trabajadores a las ciudades empezó en el siglo XIX pero sigue en la actualidad, con el agravante de que ahora se da un fenómeno que antes era menor, la especulación del suelo. 

España es uno de los países europeos que tiene más viviendas vacías como consecuencia de una total ausencia de planificación en esta materia. Ni el mercado -que mientras hay una migaja se la come- ni el gobierno ni los Ayuntamientos previeron casi nada para evitar la enorme pérdida de capitales que implicó las gigantescas inversiones en viviendas que ahora están vacías, ha descendido su precio y muchas personas que las habitaban no han podido seguir pagándolas.

De la misma forma que en todo planeamiento urbanístico se hace una distinción entre suelo urbano, urbanizable y rural, siendo el urbanizable el más interesante, porque cuando se ejecuta, una parte importante del suelo ha de ser cedida para equipamientos colectivos, los Ayuntamientos -lo diga o no la ley del suelo correspondiente- pueden establecer que una parte de ese suelo ha de ser cedido para la construcción de viviendas sociales. Por cierto, la política de viviendas sociales está completamente abandonada en España, representando hoy algo más del 1% del total de las que se construyen. 

No entro aquí en la cultura de la propiedad de una vivienda, menos extendida en otros países de nuestro entorno, donde el mercado del alquiler está más arraigado porque las viviendas en alquiler no son chozas y sus precios son asequibles. Estoy de acuerdo en considerar que el problema de la vivienda ha de alcanzar una solución de la mano de varias administraciones públicas, pero para ello es necesario intervenir el mercado del suelo. Si se deja al libre albedrío de los propietarios no hay nada que hacer. Un Ayuntamiento que cede suelo equipado para viviendas sociales se hace acreedor a que su Comunidad Autónoma y el Estado pongan de su parte. 

Cualquiera que eche un vistazo a la política presupuestaria en materia de vivienda (Estado) verá que es irrisoria la partida que le corresponde. Las dos últimas décadas han sido el caos más absoluto en el orden especulativo, conociéndose municipios que han visto degradarse su medio ambiente por las urbanizaciones que se han construído para ahora estar esas viviendas vacías. 

Al problema de la vivienda en España no es ajeno el hecho de que haya desaparecido la banca pública, que podía financiar -mediante ahorro hipotecario- la compra de viviendas en competencia con la banca privada pero ventajosamente para el prestatario. ¿Como es posible que haya más de tres millones de viviendas vacías en España mientras hay personas que disponen de segunda, tercera, cuarta vivienda en el país?

Otra cosa es la ley hipotacaria existente en España, habiendo pasado ministros y ministras de colores políticos muy distintos sin que se hayan preocupado de reformarla drásticamente. Ahora se habla de la dación en pago cuando el deudor ha de abandonar su vivienda por impago, de desahucios cuando la denuncia del propietario o prestamista lleva a la ejecución de aquellos. ¿Como es posible el espectáculo (el robo) de familias desalojadas de sus casas a golpe de machete? ¿Ningún responsable público va a reaccionar ante esto?

No veo por que no se ha llegado a un acuerdo con los bancos -algo por otra parte bien poco revolucionario- antes de que estos viesen entrar en sus arcas millones de euros para su recapitalización. Puede decirse, sin temor a equivocarse, que la política de vivienda es -junto con la atención a la dependencia- de lo peor que existe hoy en España, por mucho que nos alarme la corrupción de varios cientos de cargos públicos y el crecido número de parados, que están en relación directa con el despojo de sus viviendas. 

L. de Guereñu Polán.

viernes, 19 de junio de 2015

A NOVA ORDE MUNDIAL: CAMBIOS NA ECONOMIA-MUNDO CAPITALISTA


Fai xa algunhas meses varios medios de comunicación recollían unha noticia financeira de transcendencia histórica que, sorpresivamente, non provocou a debate que se merece: a creación, por iniciativa china, do Banco Asiático de Investimento e Infraestructuras (AIIB). Un organismo financeiro co que China da un paso mais –e moi relevante- na su inequívoca intención de ocupar un lugar de hexemonía na actual economía-mundo capitalista. A aceptación que está tendo este banco da claras mostras da súa importancia: ao día de hoxe adheríronse tanto estados europeos  relevantes, practicamente todos os da eurozona –Alamana, Francia, Países Baixos, España-, amais de Gran Bretaña como membros do grupo dos chamados BRICS –Brasil, Rusia, India e Sudáfrica-, e outros estados tamén significativos –Australia, Corea do Sur, Israel-. Con un capital inicial de 100.000 millóns de dólares e o seu centro en Shanghai o AIIB ven, sen xénero de dúbidas, a cuestionar con firmeza a actual orde financeira internacional base da presente mundialización neoliberal.
Lembremos que a economía-mundo actual apóiase, dende a II Guerra Mundial, no liderado ata agora incontestable dos Estados Unidos. Un liderado maiormente baseado nunha hexemonía militar practicamente incontestable pero tamén nun grande poderío financeiro e nunha preferencia do dólar como divisa internacional. Un liderado que, a nivel financeiro, conta co soporte tanto do Fondo Monetario Internacional (FMI) como do Banco Mundial (BM).
Estados Unidos foi durante a segunda metade do século XX a potencia económica hexemónica, a que dominou o mundo impoñendo os seus intereses comerciais e as súas receitas económicas tanto ao través do FMI e o BM como da propia OMC (Organización Mundial de Comercio). Pero esta situación cambiou especialmente a partires da administración Reagan –anos oitenta-: fronte ao que se puidera pensar esta administración foi, en mais dun sentido, un auténtico desastre para os Estados Unidos. O enorme endebedamento –público e privado- en que esta administración meteu aos Estados Unidos    –familias, empresas, estado- ao tempo que o aparato produtivo debilitábase fronte a forte competencia exterior –China, Alamana- facilitou que a súa condición de potencia mundial hexemónica fora apoiándose cada vez mais no seu enorme poderío militar e na conservación do dólar como divisa internacional por excelencia e non na súa capacidade produtiva i económica.
E mentres isto sucedía o mundo observaba como emerxía cunha enorme forza produtiva e comercial unha nova potencia: China. Unha nova potencia que, hoxe por hoxe, é a primeira potencia económica mundial ao representar o 16,5% do PIB mundial e converterse, na práctica, na “fabrica do mundo”. Unha potencia que consciente do seu crecente poderío, e tamén farta do control absoluto que os Estados Unidos teñen sobre organismos financeiros como o FMI,  crea agora o AIIB (Banco Asiático de Investimento e Infraestruturas) que se converte así nun competidor directo do citado FMI (Fondo Monetario Internacional). Si agora lembramos que  China xa creara anos antes (exactamente no 1994) o Banco de Desenrolo de China e que os estados chamados BRICS (Brasil, Rusia, India, a propia China e Sudáfrica) crearon a ano pasado o NDB BRICS (Novo Banco de Desenrolo BRICS) e que ámbolos dous aparecen como fortes e directos competidores do BM (Banco Mundial) entenderemos que na actual fase de mundialización da economía-mundo capitalista en que a actividade financeira é a que domina a economía a batalla pola hexemonía está en pleno apoxeo e con tódalas perspectivas de que, cando menos no campo industrial e financeiro, os cambios de dirección son imparables. Uns cambios que cuestionan claramente a anterior hexemonía estadounidense, algo do que a propia administración Obama parece cada vez mais consciente.
Uns cambios que poden rematar afectando a propia divisa mundial -o dólar- e o seu papel nos intercambios internacionais. Por un lado está o asunto das enormes reservas en dólares que os chinos teñen no seu poder: case 4 billóns de dólares. Unha situación que fai que, hoxe por hoxe, a fortaleza do dólar estea un pouco nas mans dos chinos: é fácil pensar que lle pasaría a esta divisa se China –cousa que non vai faceren polo seu propio interese- pon no mercado todas a unha parte importante desas reservas. Polo outro están os propios intereses comerciais e monetarios de China: uns intereses que coinciden cos intereses dunha potencia hexemónica e que pasan por tratar de impoñer a súa propia divisa, neste caso o yuan. E totalmente lóxico que unha tal potencia financeira –con un volume de reservas tan enorme preparadas para seren investidas noutros estados- e comercial –con 3 billóns de euros que suman os seus intercambios comerciais China é, hoxe por hoxe, a primeira potencial comercial do mundo- queira impoñer a súa propia moeda. E así o está facendo China con un cada vez mais grande forte volume de investimentos, créditos, vendas e compras internacionais realizados en yuans e  en cada vez mais estados (África, Latinoamérica…).
Unha dinámica que parece, a primeira vista, imparable e que de seguir por este camiño converterá a China na primeira potencia mundial e nivel financeiro cando xa o é a nivel comercial e industrial.
Velaí as bases da economia-mundo capitalista de hoxe en día que poden, a pesares do inmenso poderío militar dos Estados Unidos, sinalar o comezo dunha nova orde mundial. Unha nova orde mundial na que Europa –e mais en concreto a Unión Europea- ocupa un lugar cada vez mais secundario, de cuase-periferia entre os dous colosos. Haberá, algún día, que darlle as grazas por elo a “troica” e a Alamana.
Queda por subliñar que cada vez que se produzo un cambio desta natureza na economía-mundo capitalista houbo por medio terribles guerras -a guerra dos 100 anos, as guerras napoleónicas e a I e II guerras mundiais-. Esperemos que esta vez non sexa así pero non debemos descartar esta opción mentres a primeira potencia militar a nivel mundial  sega pensando que é a forza quen domina o mundo e, mais en concreto, que é a forza militar quen debe dominar a política exterior.



Manoel Barbeitos Alcántara

miércoles, 17 de junio de 2015

EL ZAPATAZO A DOÑA MANUELA CARMENA.

Pasada ya la euforia legítima y entrañable del parto de unas nuevas mayorías locales, en algunos casos partos distócicos y complejos, asoma el enmarañado caminar que se les avecina a los nuevos ediles, muchos de ellos debutantes en la gestión publica. Y con ello, el  darse de bruces con la cruel cotidaneidad. Y como esta pone distancia entre promesas ilusionadas y realidades intratables desde la simple utopía.
Un escenario tan intrincado que lo que menos necesitaba, es la sorpresa poco grata de las majaderías de alguna mente torpe, caso del ex-concejal de Cultura madrileño…Este caballero hace apenas cuatro años, mostrando un muy perfectible sentido del humor, exhibió en las redes una ordinariez intelectual, una rudeza de sensibilidad y una carencia de sentido solidario y fraternal,  que cual boomerang se ha vuelto con toda lógica contra su situación actual. Sin la eximente de juventud o bisoñez, pues era ya persona con presunta plena capacidad de discreción.
Ahora bien, si el propio listón puesto por lo oferta política de la que forma parte exige la máxima pulcritud en orden a su  propia coherencia, no es menos cierto, que es intolerable bajo ningún prisma aceptar la campaña desproporcionada  y perfectamente orquestada  contra el zafio sujeto, en una mas que visible operación de acoso y derribo de unas opción, por el simple hecho de ser una oferta distinta del sistema dilapidador y corrupto instalado en la capital -igual que en muchos otros lugares- , cuyo ultimo interés era servir a la ciudadanía…
Es un insulto a la inteligencia ver los coros farisaicos desgarrándose las vestiduras vertiendo veneno y basura, no para condenar unos twits deleznables y míseros, - que lo son sin la menor duda -, sino para dinamitar un modelo político distinto, las esperanzas de cambio y también la indignación de amplios sectores de la ciudadanía que percibe como herrumbroso y presuntamente mejorable el régimen nacido hace casi cuatro décadas. Todo ello, con la complicidad entusiasta de la prensa adicta, y la que en algún momento no se tuvo por tal, sirviendo de infatigable altavoz.
¿Tienen acaso la menor autoridad moral los miembros del utraconservador gobierno que padecemos o el partido que lo sostiene financiado de forma corrupta, presuntamente, (dicho esto por imperativo legal), durante décadas? ¿Tienen la menor autoridad moral todos esos dirigentes que hoy aúllan con logorrea indecente, tras haber vomitado  copiosas infamias, improperios, injurias,  calumnias,  tanto en  materia de violencia de género, asesinados cuyos cadáveres todavía permanecen en las cunetas, corrupción, xenofobia, anticatalanismo, etc.…etc.…etc.?  Perlas que van desde “Zapatero al hoyo con tu abuelo”…hasta, “los que Franco mató, lo tenían bien merecido” pasando por un mas moderno deseo dirigido al Sr. Iglesias “que te den un tiro en la cabeza cacho cabrón”…Dirigentes populares que a día de hoy siguen, salvo raras excepciones, en sus puestos, con la bendición de su jefe político el Sr. Rajoy y sus colegas de alta dirección....Bueno en muchos casos en posiciones mas lustrosas…salvo claro, aquellos que aun a pesar de la caritativa benevolencia de la Fiscalia dieron  con sus huesos en alguna cárcel.
En todo momento queda claro que lo que se cuestiona es su autoridad moral. Que está por debajo de los mínimos que requeriría cualquiera de las pseudo-democracias que pudieren valer de contraste con esta, que amaga en convertirse, si no lo es ya, en una vulgar monarquía bananera. Los fascistas que secuestraron España cuarenta años decían despectivamente ante un  desgobierno…eso es una republica…Hoy con todo derecho, ante tanta corrupción y despropósito, ante tantos desmanes impunes contra los derechos ciudadanos, sociales y económicos, cabe con toda justicia, legal y descriptivas afirmar,…esto es una monarquía…
El concejal madrileño ha dejado su ¿competencia? como concejal de Cultura… En su tesitura muestra escasa sensibilidad aferrándose a un acta cuyo titularidad legal la tiene, pero carece ya de legitimidad moral para ostentarla…¿O acaso es que su sensibilidad variara en otras áreas, o que de antemano se consideran de menor cuantía y por ello, han de digerir al personaje?…Solo le queda ejercer  generosidad hacia el proyecto político, hacia los que depositaron en el sus anhelos, y desde un mínimo de lealtad hacia la alcaldesa a la que ocasiona una severa crisis de imagen y política, apartarse del escenario.
Y eso sabiendo de antemano que el miserable rastreo por las redes detrás cada acto o circunstancia, es una persecución inquisitorial más que cuestionable, para usarla torticeramente. Esperemos por un mínimo de respeto al estado de derecho,  que estas labores de espionaje, algo que no cabe duda esta siendo aplicado a cada uno o una de los miembros del colectivo de Doña Manuela Carmena, no lo sean en connivencia y uso de medios de la administración pública. Sabiendo que si tal escáner se le hiciera todos los políticos, y de forma muy especial a los conservadores, llevaríamos sorpresas curiosísimas… ¿A que si Sr. Rajoy, Sr. Aznar, Sra. Aguirre, Sr. Hernando, Sr. Director General de la Guardia Civil…etc. etc.…etc.…?
Esta claro que esta crisis se salda solo con la salida del consistorio del lenguaraz individuo. Sus twiters no tienen un pase y son absolutamente inaceptables en quien debe servir a la armonía y concordia del común... Para su desgracia, sin descartar  haya corregido sus criterios y afirmado su propósito de enmienda, el ya no es de utilidad al proceso, sino sacándose del medio. Es su último servicio. Algo que el Sr. Monedero expresaba con claridad, al recordar que en política los errores se pagan dimitiendo.
Doña Carmena debe ser consciente de que el “tamayazo”, la forma carroñera e indigna de Doña Esperanza Aguirre de encaramarse en los puestos, esa reputada  ultraliberal que toda su vida parásito el erario publico y vivió de lo publico…creadora de mamandurrias con las que contentar y poner a pacer a sujetos como Gallardon o Leguina, con más de 8.000 euros al mes por hacer : NADA, ni perdió sus mañas ni ha cesado en sus intentos….Algo que también debiera tener presente el PSOE, al que las circunstancias han dejado en una muy incomoda situación y sometido a una severa prueba de honorabilidad…De momento la va superando con nota., todo hay que decirlo.

Son tiempos poco apacibles y donde las marrullerías y miserias, el “golpismo blando” entre bambalinas, cenagales en las que también se mueve la derecha más arcaica y casposa del país, solo acaban de empezar. Frente a ello, cabe traer a colación una invitación que en su facebook,-otra vez a vueltas con las redes-, hace D. José Antonio Pérez Tapias: “Izquierdistas de todos los partidos, ¡uníos ¡ (y dejaos de gilipolleces)” Pérez Tapias dixit…

Antonio Campos Romay

La desastrosa gestión de llamado Concurso Eólico de Galicia

El Tribunal Supremo acaba de emitir una sentencia que ratifica que una de las primeras y grandes decisiones de la Xunta del Sr. Feijoo es manifiestamente ilegal.
En 2009 al producirse el anuncio de la suspensión del Concurso Eólico escribí un artículo titulado: 
La suspensión del Concurso eólico una mala noticia.

Decía: Hace meses, durante el proceso del concurso eólico pilotado por el BNG en la anterior Xunta, me mostré muy crítico con los muchos errores de forma y concepto que la Consejería iba cometiendo, en especial el intentar diseñar un sector energético gallego sin tener en cuenta los condicionantes de la situación y planificación energética del conjunto de España (ver los problemas de conexión al sistema) y la existencia previa de operadores, ya instalados en Galicia, que disfrutan de conocimientos y sobre todo de derechos, en forma de inversiones consolidadas y concesiones administrativas a medio y largo plazo, lo que permite afirmar que sin su colaboración las iniciativas a tomar tienen poco futuro.
Pero con un punto de partida en el que solo un 30% de la energía primaria consumida en Galicia procede de un origen autóctono, y que sin embargo existen excedentes de producción en electricidad, además que en esta área los recursos propios son capaces de cubrir “casi” el 100% del consumo interno con fuentes primarias autóctonas, cualquier avance en la implantación de renovables es bueno para Galicia y para el conjunto de España, por lo que la mala solución dada al concurso era mucho mejor que la “no solución”, a la que nos llevan las decisiones de la actual XUNTA y el auto judicial (provisional) que paraliza el avance en la ejecución de las inversiones derivadas del concurso. Por si ello fuera poco, la conflictividad generada, con las actuales acciones administrativas y judiciales, garantiza que los futuros concursos van a seguir un camino similar, se tomen las precauciones que se tomen al elaborar las bases y decidir los concursos.
Como la única apuesta clara en materia de energía, para el bien de Galicia y de España apunta al incremento máximo posible en producción de energía eléctrica con recursos propios, esa es la dirección en la que la Xunta debería empujar y en la que debe poner recursos y especial atención; la paralización, el simple retraso, es una muy mala noticia para los sufridos ciudadanos, aún cuando para muchos esto no sea evidente.

En 2011, a raíz de las decisiones del Gobierno del Sr. Rajoy sobre las renovables insistía en el tema:

“… auguraba que la decisión traería numerosas dificultades, y de cierta gravedad, para las iniciativas que se tomaran sobre el parque eólico futuro: me quedé muy corto. La decisión del gobierno de la nación de paralizar indefinidamente la instalación de nueva potencia en energías renovables, ha devenido en un verdadero desastre, para el conjunto España, pero también y muy especialmente para Galicia, a quien se le paralizan las inversiones en unos 2.000 megavatios eólicos, (potencia equivalente a la de dos grandes centrales nucleares) y lo que es peor las inversiones complementarías en proyectos industriales y de desarrollo comprometidas por los nuevos adjudicatarios. Al tiempo que la misma existencia de la industria gallega de fabricación de componentes de  generadores se ve seriamente comprometida, en un momento en que la crisis socaba las bases de todo el, no muy potente, sector industrial gallego.
Pero lo que resulta más sorprendente, negativo y catastrófico, es que el sujeto obligado a defender los intereses más próximos de los ciudadanos gallegos, la Xunta, no solo se inhiba en el problema, haciendo caso omiso del cumplimiento sus obligaciones, sino que sea un factor de apoyo a una decisión que va en contra de las propias tomadas en su Consello Oficial y publicadas en el DOGA ( Diario Oficial de Galicia), traicionando, sin ningún tipo de duda, lo que juraron o prometieron ante la Biblia y el Estatuto.

El T.S. ha ratificado que mi análisis era correcto.
Una pregunta me quema ¿Como es posible que con los expertos jurídicos, administrativos y sobre energía que dispone la Xunta, el gobierno gallego no previera lo que iba a ocurrir?
Otras que no quisiera hacer pero son obligadas: ¿Cuánto nos va a costar este desastre? Y ¿Quién asume responsabilidades y dimite?

Junio de 2015

Isidoro Gracia

viernes, 12 de junio de 2015

EL MIEDO DE LOS JUBILADOS

El número de pensionistas (que no de pensiones) de la seguridad social en España es de 8.500.000 personas. La población total española se acerca a los 47 millones, y el número de electores según el censo para este año 2015 se acerca a los 35 millones. Los jubilados y pensionistas españoles pues, suponen el 25% del electorado, un porcentaje importante, tal vez decisivo.

Con la crisis, los poderes financieros y el Partido Popular asustaron a los jubilados y a sus familias con la amenaza de la quiebra del sistema de las pensiones publicas, y a su amparo congelaron sus cuantías e impusieron una reforma en virtud de la cual han  perdido poder adquisitivo y están condenadas a seguir perdiéndolo en los años futuros. En paralelo subieron el IRPF, excluyeron muchos medicamentos de las prestaciones e impusieron el copago de todos los demás incluidos en la seguridad social. Además, durante estos años, los jubilados y sus pensiones han servido de colchón social para paliar las graves carencias en materia de prestaciones por desempleo de sus hijos y nietos en paro.

Ahora, cuando con la llegada de las elecciones se propaga el inicio de una recuperación y un fin de la crisis que no vemos por ningún sitio más que en boca de los ministros y sus amigos, Mariano Rajoy y el Partido Popular vuelven a recurrir al miedo para que les sigan votando, diciendo que o su política económica y sus reformas, recortes y privatizaciones o el desastre. Creo que se equivocan o mienten, y los resultados de las recientes elecciones municipales y autonómicas lo ponen de manifiesto ¿Acaso tienen miedo a que cambie la política económica los más de cinco millones de parados? ¿O los más de dos millones y medio de ellos que ya no cobran ningún tipo de subsidio? ¿O los  tres millones de asalariados con contratos por horas, mal pagados y con días o semanas de duración? ¿O los que trabajando, tienen congelado su salario desde hace años y han visto desaparecer su convenio colectivo? ¿O los cientos de miles de jóvenes y sus familias que se han visto obligados a emigrar? Desde luego que no. Los que si tienen miedo al cambio son los que se han beneficiado y se siguen beneficiando de la crisis y de las medidas injustas que consiguieron imponer a su amparo.

Hace unos días, tuve ocasión de asistir en A Coruña a un encuentro de jubilados y pensionistas de la UGT en el que participaron más de 400 personas procedentes de toda Galicia. Entre los actos del día, destacó la asamblea en la que intervinieron oradores de Galicia, Asturias y Madrid, que reprocharon con dureza al Gobierno que haya destruido el “Pacto de Toledo” que aseguraba el poder adquisitivo de las pensiones, y reformado el sistema con medidas que sitúan en un peligroso declive hacia la precariedad a las pensiones actuales y futuras. También el haber dispuesto -ya los anteriores gobiernos lo hicieron, pero este en mayor medida- del dinero de los Presupuestos de la Seguridad Social para efectuar pagos por importe de miles de millones que correspondería atender con cargo a los Presupuestos Generales del Estado, como por ejemplo los complementos de mínimos y las pensiones y subsidios de carácter asistencial.

Expresaron también un gran temor: Que nos quedemos sin el Fondo de Reserva que este gobierno recibió con 66.815 millones de euros y que ahora está en 41.634, un 40% menos, y amenazado de nuevos recortes en los próximos meses, no solo por las pagas extraordinarias de julio y diciembre, sino porque la deuda del estado sigue subiendo y echar mano de los fondos de la seguridad social (el de reserva y el ordinario) es un recurso fácil, y mas para un gobierno que busca privatizar el sistema.

Pero la preocupación más dolorosa expresada por los oradores y los asistentes a la asamblea fue la del futuro de sus hijos y nietos. Otra vez de nuevo el panorama del paro generalizado, los bajos salarios, la emigración que muchos de ellos ya sufrieron, y el temor a que una gran mayoría de los jóvenes de hoy no alcancen ni de lejos los años de cotización necesarios para cobrar una pensión pública decente, y que, precisamente por estar en  paro o trabajando en precario con salarios absolutamente insuficientes, tampoco puedan pensar en pagarse un plan de pensiones privado. Los jubilados de hoy, nacidos y educados bajo la dictadura, son una generación que luchó duramente para conseguir dejar a sus hijos y nietos un país mejor que el que ellos encontraron, y estaban en el camino de conseguirlo hasta que llegaron los saqueadores.

Es cierto que entre los jubilados y entre los trabajadores en general hay miedo si, pero a que las cosas no cambien de una vez, miedo a que sigan como están. Miedo al horizonte que dejan para ellos y sobre todo para sus familias las medidas que ha impuesto el Partido Popular a lo largo de estos años.

Xesús Mosquera Sueiro / 12 de junio de 2015



VELLOS E CADUCOS DOGMAS






Javier Vega de Seoane, presidente do Circulo de Empresarios pide “a redución do salario mínimo interprofesional (SMI) para os mozos sen formación e, ademais, que parte do seu soldo sexa en especie”.

Helge Berger, xefe da misión do FMI para España, sinala que “a consolidación do crecemento” –en España- “e unha redución sostida dos niveis de endebedamento público e privado requirirán esforzos fiscais e reformas estruturais adicionais”.



Aínda que pareza incrible pero a pesares das evidencias, os avances científicos e as experiencias, os que hoxe en día gobernan en Europa –a troica (FMI,BCE,CE), o goberno alemán, o goberno español..-, así como as elites económicas e sociais –bancos, multinacionais- que os sustentan e os altofalantes que os serven, seguen defendendo en materia de economía vellos e caducos dogmas. Vellos e caducos dogmas que cando foron aplicados en outras épocas demostraron de xeito contundente que non serven para solucionar determinados problemas económicos senón que colaboran a súa agudización e prolongación como proba a crise actual e  experiencias históricas anteriores.

Nas declaracións recollidas ao principio deste texto atopamos un reflexo do subliñado: a repetición dos vellos dogmas económicos que fracasaron unha vez si e outra tamén pero que non por elo deixan de seren utilizados polos representantes do capital.

Así de novo os empresarios e a troica volven, por enésima vez, co dogma de que para crear emprego é preciso rebaixalos salarios reais dos traballadores –por suposto que non din ren das ganancias das rendas de capital- a pesares de que en todos estes anos –décadas xa- a participación das rendas do traballo na riqueza española non deixara de caer, de que o salario real medio en España así como o custo da man de obra –un 27% mas barata que a media da eurozona- estean moi por debaixo da media nos países da eurozona e de que teñamos un dos SMI mais baixos de Europa –so superior ao de Portugal e Grecia-. Nada, de nada lle valen a esas elites estas evidencias. A esas elites non se lles ocorre pensar que “poida que” os baixos salarios sexan unha das causas do elevado desemprego, pensar en que relación pode haberen en que aqueles estados europeos da eurozona (España, Portugal, Grecia..) con salarios reais mais baixos son tamén aqueles que teñen taxas de desemprego mais elevadas. Non se lles ocorre pensar que logo dunha crise tan fonda como a actual –co dobre estoupido das burbullas inmobiliaria e crediticia- o que cumpría –e segue cumprindo- é unha recuperación dos salarios reais –non baixalos aínda máis como pide Javier Vega- e un forte impulso fiscal público –todo o contrario dos esforzos fiscais de que falan os burócratas do FMI- pois do contrario o desemprego seguirá subindo –ou será emprego de mala calidade, precario- e a economía non se recuperará solidamente en liña cos crecementos tidos antes da crise.

Pero ollo, o estímulo fiscal debe estaren ben deseñado. Aínda que poida parecer estraño e esaxerado é moi probable que un maior gasto nas prestacións de desemprego –cubrindo a tódolos traballadores desempregados que non perciben prestación algunha- seguramente tería un efecto positivo sobre a economía superior o diñeiro gastado no rescate dos bancos –mais de 100.000 millóns de euros-. A explicación é sinxela: os traballadores desempregados que perciban eses ingresos gastarannos inmediatamente para cubrilas primeiras necesidades o que repercutirá directamente sobre o consumo e, xa que logo, a renda nacional, o emprego e a produción. O mesmo cabe dicir do incremento dos salarios e das prestacións e pensións mais baixas ou da implantación dunha renda básica para aquelas familias que non teñen ingresos ou non chegan ao SMI. Como nos mostran infinitas experiencias os incrementos na renda derivados deses estímulos son moi superiores o incremento do gasto que provocaron. 

Experiencias que tamén nos subliñan cales son os “efectos positivos” sobre a economía –as familias, as pemes, o comercio polo miúdo..- dos rescates bancarios tal como foron concibidos: nulo pero, a cambio, incrementan expoñencialmente a débeda pública. O mesmo cabe dicir sobre o impacto das rebaixas fiscais as rendas altas: nulo, xa que aquelas destinarán esas ganancias ao aforro ou a especular. Que a estas alturas aínda haxa que explicar estas ideas económicas básicas!!!!.

Volvendo a teima neoliberal de reducir máis e máis os salarios como condición imprescindible para entrar na senda dun crecemento económico sostido sería suficiente con subliñar como as evidencias estatísticas das derradeiras décadas desmenten estes dogmas. Os salarios reais non pararon de decrecer –dende mediados dos anos 90- sen que por elo se evitará a grande depresión do 2008, e seguen decrecendo –entre un 13 e un 17% segundo o xénero- sen que mellore a competitividade da economía i esta se recupere. A razón é tan simple e obvia que pode resultar incrible que non se entenda e/ou non se queira aplicar: a rebaixa ou a caída dos salarios –especialmente dos medios e baixos- non fai mais que agudizala crise xa que as familias reducen o gasto afectando negativamente ao consumo e, de resultas, a demanda agregada que ten no consumo –e este nos salarios- unha compoñente moi relevante. Algo que esta grande recesión puxo en evidencia unha vez máis: baixando os salarios as empresas baixan os custos pero funden a economía.

O argumento neoliberal sinala que os problemas que ten España –como Grecia, Portugal- derivan de que os traballadores teñen uns salarios demasiado elevados. Baixo este dogma o goberno español –portugués, grego..- ten que faceren que baixen os salarios pois elo melloraría a competitividade española e sairiamos da crise. Un argumento que, ademais de falaz como sinalei antes, non ten base científica algunha: os custos dunha empresa dependen tanto dos salarios como da produtividade polo que a redución daqueles depende tanto do nivel dos salarios como do da produtividade. Incrementando a produtividade redúcense os custos –pódese producir máis a un custo menor-. E os xeitos de incrementar a produtividade poden seren varios: con melloras na organización da empresa –xornadas, horarios, desprazamentos, participación dos traballadores- increméntase a produtividade. O mesmo si se producen melloras tecnolóxicas, na infraestrutura informática e na cualificación profesional dos traballadores.

Por que os empresarios e os gobernos neoliberais non falan destas melloras na produtividade?: por que supoñen tanto unha cesión de poder –en participación e capacidade de decisión- por parte dos empresarios a prol dos traballadores, como un maior gasto público por parte dos gobernos –en ensino, I+D+i, transporte público-. Algo ao que ámbolos dous non parecen dispostos.

Hai outro elemento relevante en relación con os custos e que afecta ás grandes empresas. Tódolos estudios serios apuntan a que hai unha coincidencia na maioría dos estados da eurozona que é o crecemento dos custos laborais unitarios quen, velaí a falsidade do dogma neoliberal, subiron por mor da alza nos prezos dos produtos e non dos salarios. Unha alza nos prezos que, ás grandes empresas lles permiten enormes ganancias. Unhas alzas nos prezos que se trasladan ós custos das pemes que son quen realmente crean emprego pero que non poden resistir eses custos –carburantes, electricidade, comunicación, servizos-. Algo do que xa temos falado noutros comentarios.

Nembargante, non debéramos esquecer que estes dogmas agochan un fortísimo interese de clase: das clases de rendas altas interesadas sempre na obtención das máximas ganancias a costa das clases de rendas medias e baixas.




Manoel Barbeitos Alcántara